Aunque de momento no va a prender la mecha, el próximo Descenso Folklórico del Nalón, la fiesta por excelencia de Laviana, tendrá olor a pólvora y a fuego. La Asociación Amigos del Descenso ha hecho muy buenas migas con el gremio de falleros de Valencia, compartiendo experiencias y aprendiendo de las técnicas de los levantinos para mejorar las construcciones de las embarcaciones.

Durante la jornada del viernes y del sábado, el presidente del Gremio Artesano de Artistas Falleros de Valencia, José Ramón Espuig Escrivá, y el "Maestro Fallero Fallas", Ximo Esteve, impartieron un taller sobre las técnicas de trabajo y los materiales que se usan en las impresionantes fallas valencianas. Además, también desarrollaron una labor práctica sobre cómo construyen sus ninots, de forma que se puedan aplicar a las embarcaciones que surcan el Nalón.

José Ramón Espuig señaló que la labor de las peñas que construyen las embarcaciones "es muy similar a lo que hacemos nosotros en Valencia con las fallas". "Ojalá nuestra experiencia pueda ayudar a la gente para que las carrozas del descenso vayan cogiendo más relevancia de la que tienen", indicó el presidente del Gremio de Falleros, que reconoció que la de Laviana "es una fiesta que se conoce poco y se debería de valorar más a nivel nacional". Es uno de los compromisos, el de ayudar en la promoción, que los artistas falleros adquirieron con el presidente de la asociación Amigos del Descenso, Pablo Vázquez, que también se mostraba "encantado" después de dos días de aprendizaje.

En la clave técnica, los maestros falleros explicaron a los discípulos lavianeses diferentes trucos para mejorar y facilitar la construcción de las carrozas y también para ahorrarse unos eurillos. Espuig explicó que "aquí están usando un poliuretano demasiado duro y deberían hacerlo con uno mucho más blando para que sea más fácil de trabajar". "Ese era el mayor error, pensar que cuanto más duro es el corcho mejor y el trabajo y el acabado no puede ser tan fino", indicó Espuig, que aseguró que "si siguen estos consejos, las carrozas flotarán mejor y, además, ahorrarán bastante, porque el material que se usaba aquí era el más caro".

Otro de los trucos que los falleros compartieron con las peñas del Descenso es la necesidad de seccionar las piezas de la construcción para que sea más fácil el trabajo. "Hay técnicas digitales que te permiten diseñar las piezas y permiten una mejor y más rápida construcción de la carroza, y es algo que les hemos mostrado", dijeron los maestros falleros.

La delegación valenciana también quedó gratamente sorprendida con las carrozas del Descenso del Nalón. "Para el conocimiento que estos chavales tienen de escultura y construcción han hecho unos trabajos impresionantes", indicó el maestro fallero, que bromeó con que "este año al final del Descenso, pueden hacer una falla".

Después de la teoría llegó la práctica. Con material sobrante de otras ediciones del Descenso se hicieron varias figuras, se usaron técnicas de corte y de pintura de las fallas. Medio centenar de peñistas de una docena de peñas fueron los que acudieron. "Y el que no haya venido se va a arrepentir", indicó Pablo Vázquez, presidente de Amigos del Nalón, que señaló que "esta experiencia ha sido muy positiva, porque ganamos experiencia, aprendimos mucho y quizá sea una de las mejores iniciativas que hemos tenido". Además, Pablo Vázquez indicó que "para nosotros es muy importante que además nos van a ayudar a promocionar nacionalmente el Descenso y si ese hermanamiento se consolida, para Laviana va a ser fantástico".