El Juzgado de lo penal número 1 de Langreo condenó a los dos empresarios propietarios de la empresa Nalón Carcami, que explota el restaurante de la cadena Burger King en el centro comercial de El Entrego con una multa de 3.600 euros -1.800 euros para cada uno- por coaccionar a sus trabajadoras para que no votaran la lista de CC OO en las elecciones sindicales. Tres empleadas fueron despedidas después de que la central ganara los comicios, aunque tuvieron que ser readmitidas por sentencia judicial. El sindicato anunció ayer que la pena impuesta "es insuficiente" y anunció que recurrirá la sentencia.

La sentencia "reconoce como hechos probados que los acusados, A. G. C. y F. M. G. G., sabedores de que iban a celebrarse elecciones sindicales el 12 de junio de 2015, llamaron el día antes a la encargada para que transmitiera a los trabajadores que el candidato de confianza de la empresa era la trabajadora que se presentaba por UGT y que, de no resultar elegida,' tomarían represalias', que ello supondría 'echar un pulso a la empresa', y que quien no estuviese de acuerdo con 'les coses que se van a hacer' está libre de no ir a votar, conversación que la encargada hizo saber a los diez trabajadores del restaurante".

Esto ocurrió, según la sentencia, cuando los propietarios conocieron que se había presentado otra candidatura por CC OO. La candidata de este sindicato fue telefoneada por la encargada, quien le dijo que si no salía elegida "habría represalias contra ella" y que, en caso contrario, "las represalias se dirigirían contra otras trabajadoras". Tras celebrarse las elecciones, CC OO obtuvo siete votos y UGT tres. Los propietarios y ahora condenados despidieron meses después a tres trabajadoras, aunque dos de ellos se declararon nulos y la otra logró un acuerdo en la Unidad de Mediación, Arbitraje y Conciliación.

El sindicato CC OO apelará la sentencia del juzgado langreano "pidiendo que sea más contundente y ejemplar para que no vuelvan a suceder los hechos relatados".