La Policía Local de Langreo y los bomberos con base en San Martín del Rey Aurelio tuvieron que actuar en la tarde de hoy en Sama en un acto vandálico que, si bien no tuvo consecuencias, sí podría haber acabado en algo grave. Vecinos de la calle Torre de Abajo alertaron de un fuerte olor a gas en la zona. El olor salía de una casa, el número 7, en la que no vive nadie. Alguien había forzado la puerta del inmueble y había abierto la llave del gas.

La llamada de alerta, sobre las ocho de la tarde, movilizó a los bomberos y a la policía, que acudieron hasta la zona. El "gracioso" que entró por la fuerza en la casa dejó abierta la llave del gas, un servicio que no se había dado de baja, ya que la vivienda no hacía mucho tiempo que estaba vacía. Afortunadamente, todo se quedó en un susto. El siguiente paso es anular esta llave del gas para que un suceso como el de hoy no vuelva a ocurrir.