La sociedad pública Sogepsa, propietaria de los terrenos del antiguo barrio de Oñón, y el Ayuntamiento de Mieres han firmado un convenio que permitirá aprovechar los citados solares como aparcamiento. En principio, el Consistorio podrá hacer uso de este suelo durante un periodo de seis años. La planificación pasa por abordar este mismo año un proyecto dotado con una inversión de 241.883 euros para habilitar 300 estacionamientos, al tiempo que se reordenará el entramado vial de la zona norte de la ciudad. En el aire queda, por tanto, el plan residencial previsto inicialmente para Oñon, que preveía la construcción de más de 200 pisos. La zona ya se venía utilizando como estacionamiento, pero sin plazas delimitadas.

El Ayuntamiento ha optado por el pragmatismo a la hora de plantear un aprovechamiento a medio plazo de los terrenos de Oñón. Así, ha cambiado un proyecto de 200 pisos por uno de 300 aparcamientos. Al menos provisionalmente, ya que el gobierno local matiza que en 2023, cuando caduque el convenio de cesión de la parcela, valorará de nuevo la viabilidad de poder ejecutar el plan urbano inicial. De hecho, los gestores municipales de IU han mantenido contactos a lo largo de los últimos meses con constructoras de fuera de la región para sondear la posibilidad de poder edificar en la finca que se encuentra justo detrás del polideportivo, en la zona este del río San Juan. Estos terrenos no han sido incluidos en el proyecto del nuevo aparcamiento, por lo que seguirán libres. De momento, las gestiones del Ayuntamiento no han dado fruto. Los últimos inmuebles de Oñon que permanecían en pie fueron derribados en 2009. El planteamiento inicial de Sogepsa incluía un plan residencial de 214 viviendas, de las que 136 iban a ser protegidas. Sin embargo, la sociedad cambió de parecer en 2008 y consignó en su memoria anual que todos los pisos corresponderían a mercado libre. El asunto fue destapado por IU y originó una fuerte controversia política. El entonces alcalde, Luis María García, del PSOE, realizó varias gestiones ante el Gobierno regional y logró el compromiso de los responsables autonómicos de que Oñón contaría con vivienda social, aunque sin especificar de qué tipo y en qué número.

Pasado el tiempo, y una vez que el Pleno dio luz verde a Sogepsa para que operase en la zona, la sociedad decretó que las 212 viviendas que plantea saldrán a la venta en el mercado libre. Con tanto ir y venir, el estallido de la burbuja inmobiliaria se llevó por delante toda la planificación. Sogepsa ha venido recalcando a lo largo de los últimos años la imposibilidad de dar cobertura económica al plan urbano de Oñón en la actual tesitura del mercado.

Reorganización

Ante la evidencia de que el proyecto de Oñón tardará en ejecutarse y valorando las necesidades de aparcamiento que tiene Mieres, el Ayuntamiento ha optado por actuar de manera práctica y construirá 300 aparcamientos. En concreto, según consta en el proyecto técnico, además del citado aparcamiento público, está prevista la instalación de un nuevo sistema de alumbrado y una mejora de la ordenación de la circunvalación viaria en el área de influencia. Para ello se construirá una nueva glorieta en la intersección entre avenida de México y Numa Guilhou y un nuevo acceso al parking desde la calle Escuela de Capataces.