Un estudio presentado recientemente en los cursos de verano de la Universidad Menéndez Pelayo, en Santander, e impulsado por la Asociación Española de la Carretera (AEC) y la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (SEOPAN) alertó de la peligrosidad de la AS-117 y de la AS-19, proponiendo actuaciones concretas para mejorar la seguridad. En el caso del Corredor del Nalón se plantea realizar una inversión de 10,5 millones y de 9,9 millones para la vía Gijón-Avilés. Son las únicas dos vías asturianas de un informe que analiza 73 tramos de vías de la red de carreteras del país.

Las medidas son genéricas y van desde actuaciones de bajo coste hasta otras de mayor envergadura. En el Corredor del Nalón se plantea la colocación de firmes antideslizantes, la mejora de la iluminación y de la señalización, la instalación de bandas sonoras, el tratamiento de cunetas, la mejora de accesos y enlaces o la colocación de franjas transversales de alerta. Las actuaciones de mayor calado propuestas para tramos de especial peligrosidad se centran en aumentar la capacidad de la vía con fórmulas como las duplicaciones de calzada o la ampliación de la plataforma.