Ochocientos kilómetros después y tras unos 800.000 volteos, la rueda solidaria llegó hoy a la plaza del Obradoiro, en Santiago de Compostela. El peculiar peregrinaje, que comenzó hace 17 días en Irún y en el que los participantes fueron turnándose para ir dando vuelcos a una gran rueda de tractor de cien kilos, tenía por objeto recaudar fondos en la lucha contra el cáncer y la fibrosis quística. La iniciativa formó parte de la campaña solidaria Revuélcate 2017. Sus promotores son los responsables del gimnasio Linares de Sotrondio. En total fueron unos 800.000 vuelcos, repartidos en 16 noches y 17 días, a una velocidad de unos 2 kilómetros por hora. La campaña recauda fondos "vendiendo" cada volteo de la rueda.

El año pasado ya hubo una experiencia similar, más reducida, cuando los impulsores fueron desde Sotrondio a Covadonga volcando el gran neumático de tractor. Entonces lograron recaudar casi 9.000 euros. La rueda en ningún momento para de avanzar, y siempre va volcándose. Nunca rueda. Este vuelco de ruedas es una de las pruebas más conocidas dentro de los entrenamientos de "crossfit". La salida del reto fue en Irún y se atravesaron ciudades como Bilbao, Santander y Oviedo. Todos los fondos irán a parar al Instituto Universitario de Oncología del Principado de Asturias (IUOPA) y la Federación Española de Fibrosis Quística.