Es fácil encontrar listas con las ciudades del mundo que sufren mayores problemas de tráfico. La circulación es un caos en Bangkok, Estambul y Río de Janeiro, por poner algunos ejemplos representativos. Todo ranking que se precie tiene estas ciudades en cuenta. Cualquier persona que visite estos lugares sabe de antemano que tendrá problemas tanto para circular como para aparcar si decide coger el coche. Ahora bien, donde pocos esperarían encontrarse con un escenario de estas características es en un escondido polígono de Mieres.
En el parque industrial de Baíña la mayoría de los empresarios están que echan humo. Pasear por el polígono cualquier día de semana en horario laboral se convierte en un tarea nada sencilla, ya que muchas de las aceras están tomadas por los vehículos. Los coches se "apilan" en los viales sin orden ni sentido del más mínimo respeto de las normas viales y de convivencia. Empresas como Otero, Llaneza o Efinco se sienten muy perjudicadas por este descontrol, ya que casi a diario se encuentran con turismo aparcados delante de los accesos a sus instalaciones: "Pagamos las pertinentes licencias, pero nadie nos hace caso cuando nos quejamos", señalan los empresarios. Hasta los propios de vecinos del pueblo de Baíña se quejan por el caos existente en los viales del polígono, que muchos utilizan habitualmente para pasear.
En el polígono de Baíña parece aplicarse el lema aparca donde quieras. Los coches se dejan encimas de las aceras, en los accesos a las naves industriales, bloqueando los pasos de peatones y en cualquier sitio que espacio suficiente para que quepa un turismo. Los empresarios explican que así están la cosas desde hace muchos meses. Algunos han trasladado su malestar al Ayuntamiento. La respuesta que reciben es que debe ser la Guardia Civil quien ponga "orden" en el polígono. Por su parque, el instituto armado se remite al consistorio. Así las cosas, el caos se ha extendido con total "impunidad", señalan impotentes los industriales más perjudicados.
Los empresarios consultados por este diario apuntan a la plantilla de la fábrica de Thyssenkrupp Airport Systems, dedicada a las pasarelas de aeropuerto o "fingers", como principal responsable de lo que sucede en el polígono mierense: "Lógicamente los coches no llevan un distintivo que permita su identificación, pero es evidente que se trata principalmente de trabajadores de esta empresa, ya que los vemos entrar y, además, es el entorno de la factoría donde más problemas hay", señalan los portavoces de los industriales.
Los afectados también se quejan de que la reordenación vial del polígono, que en su momento introdujo aparcamientos en batería, impide que muchos trailers tengan espacio suficiente para acceder a las naves.
