La ampliación de la empresa Asturiana de Laminados (Asla), que en los últimos días ha contratado al exdiputado socialista Antonio Trevín para "pilotar" su llegada al mercado sudamericano, trae de cabeza a la Corporación de Lena. La situación del área industrial es muy complicada: la empresa tiene ya en marcha las obras para una nueva nave, que permitirá poner en marcha otra línea de producción y generará ochenta empleos. ¿Una buena noticia? No del todo. La actuación no tiene licencia, ya que el plan parcial no ha recibido el visto bueno de la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA). Si no hay permiso, adiós a la ampliación: tendrán que derribar lo que ya han construido.

Urge un arreglo, aunque sea temporal. Es por eso que el gobierno local (IU) impulsa la concesión de una licencia provisional, pero no la firmará si no hay un acuerdo unánime: "Se pide la misma unanimidad que ha habido en todas las fases", afirma la máxima dirigente local, Gema Álvarez (IU). El PP da su respaldo y también Compromisu por Lena. Pero el portavoz del PSOE, Daniel Sánchez Bayón, es rotundo: "No seremos cómplices de una ilegalidad". Y añade que su grupo ha puesto sobre la mesa "una propuesta en tono constructivo, dentro de la ley, y no la quieren escuchar". Gobierno y PP, tras una junta de portavoces, mantuvieron ayer un encuentro con líderes sindicales y representantes de la plantilla de Asla.

Fue una reunión larga, porque reflexionar sobre la situación lleva su tiempo. El problema empezó a fraguarse en 2007 cuando, bajo el mandato del socialista Hugo Morán, el área empezó a funcionar con dos empresas (Asla y Rioglass). El suelo no estaba urbanizado y el proyecto del polígono de Villallana era ambicioso, acorde con los tiempos de bonanza. Llegó la crisis, y el Ayuntamiento reformuló el plan parcial: un documento "muy modesto", adaptado a la escasa demanda. La demanda empresarial caía en picado, pero la polémica estaba al alza. Ramón Argüelles (tras una denuncia del entonces portavoz del PSOE, Víctor Manuel Fuentes y la secretaria general del PSOE de Lena, Montse Álvarez) declaró ante el juez por un presunto delito de "desvío de subvenciones". Fue absuelto.

Asla empezó a tramitar su ampliación. Con la promesa de 80 empleos, las puertas del Ayuntamiento se abrieron. Y siguen de par en par. Todos los grupos coinciden en que la ampliación de la compañía será positiva para el concejo, pero no están de acuerdo en la tramitación. Hasta ahora, todas las decisiones tomadas en relación al área han sido unánimes a pesar de que, reconocen fuentes municipales, "hubo muchos obstáculos que sortear".

Falta sólo un escollo por superar. Aquel plan parcial "más modesto" no recibió el visto bueno del Principado. La negativa se refiere a un cambio en los accesos, y es ahí donde está la idea del PSOE de Lena: proponen mantener los accesos originales (por la A-66) y conseguir así el visto bueno de la CUOTA para el plan parcial. Si hay plan parcial, no hay problema para la licencia de obras.

De vuelta a la reunión de ayer, el gobierno local, los trabajadores y los sindicatos no hicieron valoraciones. Sí expuso su punto de vista Ramón María Marinero, portavoz del PP: "Antes de la reunión hubo una junta de portavoces y, de la oposición, sólo he asistido yo". "Creo que este tema es de suficiente calado para que todos digamos 'sí' a la licencia", añadió.

El PSOE dice no, pero con matices. Bayón critica que se convoque una junta de portavoces: "Únicamente asistiremos al órgano que sea competente para resolver el asunto que se trate y en el que se levante el correspondiente acta oficial". Quieren dejar claro que "no seremos cómplices de una ilegalidad". Y apuntan que la unanimidad no es necesaria para dar licencia a Villallana. "Lo que busca Izquierda Unida son cómplices de su mala gestión", zanjó.