Una flor blanca por Francisco, otra por Bruno, una más por Elke... así hasta dieciséis, una por cada víctima de los atentados de Barcelona y Cambrils. El círculo de claveles, dispuestos en el suelo alrededor de una vela, fue el epicentro de la concentración organizada por la comunidad musulmana de la comarca del Nalón para mostrar su rechazo al terrorismo y manifestar sus condolencias a las familias de los fallecidos y heridos en los ataques yihadistas de Cataluña. Fue un acto sencillo, que reunió a un centenar de personas frente al Ayuntamiento de Langreo y en el que el mensaje llegó alto y claro: "El Islam no es terrorismo. Los crímenes los comenten criminales, no las creencias, las ideas o las razas". La concentración concluyó con un minuto de silencio roto únicamente por el sonido de una gaita y los aplausos de los asistentes al acto.

La cita era a las doce del mediodía, pero desde media hora antes ya paseaban por la plaza representantes de la nutrida comunidad musulmana de la comarca del Nalón (integrada por más de doscientas personas) y responsable de la Asociación Pro Inmigrantes Intervalo, que colaboraron en la organización de la concentración. También había representantes de todos los partidos políticos, de sindicatos y de colectivos sociales y vecinales del Valle. La encargada de leer el comunicado institucional fue Leila Barakat, que inició su intervención explicando el simbolismo del acto: "Aquí hay una vela y unas flores, dos cosas sencillas que nos reúnen hoy aquí. Unas flores en recuerdo de los que se fueron, en su memoria, en su homenaje. Una vela, por los que quedan, confiando de que nunca más tengamos que depositar más ramos, ni más flores, una vela con la esperanza de que no se repitan actos violentos, porque si siembras odio recoges violencia. La paz y la justicia solo se recogen sembrando justicia y paz".

Tristeza

Barakat resumió en sus palabras el sentir de la comunidad musulmana. "Todos estamos tristes por los actos terroristas acontecidos en Barcelona y Cambrils. Pero no aterrorizados. Y no vamos a seguirles el juego a esos desalmados. Siembran odio, pero recogerán justicia; siembran temor, pero recogerán firmeza; siembran violencia y autoritarismo, pero recogerán respeto y democracia. No les tememos porque la razón está de nuestra parte", afirmó.

La joven, sirio-española, manifestó que "soy inmigrante y vine con mi familia en busca de un futuro mejor que no tenía en mi país, igual que antes vosotros o vuestros padres o abuelos y ahora también vuestros hijos se van en busca de una oportunidad acorde a su formación. En nuestra sociedad sobran los que se quejan de que solo se les da ayudas a los inmigrantes y se las deniegan a los nativos, primero porque no es verdad y en segundo lugar porque sólo reciben ayudas los que tiene derecho a ellas".

En el comunicado también hubo palabras de agradecimiento a los asistentes a la concentración, muestra de que son mayoría los que rechazan la violencia, remarcó Barakat. "Hay personas que se permiten azuzar su odio y sus frustraciones contra los más débiles. Esa gente no merece la pena, son muchos, muy ruidosos, pero hay muchos más silenciosos, que son buena gente como todos los aquí presentes".

Barakat concluyó la lectura del manifiesto remarcando que el Islam no tiene que ver con el terrorismo. "Los crímenes los comenten criminales, no las creencias, las ideas o las razas... porque sí así fuera todos seríamos pederastas, maltratadores, violadores o criminales. Por eso os animamos a que todos, sembremos paz, justicia e igualdad y conseguiremos tener unas sociedad mas justa, igual y solidaria". Una ovación enmarcó las últimas palabras de Barakat, antes de que tuviera un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas. En realidad, sí hubo un sonido, el de la gaita, como símbolo de la ligazón entre la comunidad musulmana y la tierra en la que vive.

Convivencia

Las palabras de Barakat encontraron eco en mucho de los musulmanes que residen en la comarca. Fue el caso de Omar Aziz, imán de la mezquita de Ciaño. "Sentimos una pena enorme por lo que pasó. Los terroristas dicen que lo hace en nombre del Islam pero es falso porque los musulmanes no representamos la violencia. El Islam es todo lo contrario, es paz y convivencia. Nada de terrorismo ni de actos criminales", explicó Aziz, para añadir a continuación: "Hay algunas personas de la comunidad musulmana que llevan aquí treinta años y nunca hemos tenido problemas en Asturias ni en Langreo; hay muy buena convivencia".

Hicham Bald, natural de Marruecos, reside en Langreo desde hace trece años y es el presidente del centro religioso islámico "Mezquita Atawhid", "la primera que se puso en marcha en Asturias, quizá junto a la de Oviedo". "No hay ninguna religión que diga que tienes que hacer estas cosas, atentar contra la gente. Nosotros queremos tener una buena convivencia entre todos y nuestra religión precisamente habla de respetar al otro". Bald aseguró que la comunidad musulmana está formada "por unas cincuenta familias, más de 200 personas" y que hay una gran integración. "En el valle del Nalón estamos muy bien y lo que queremos es estar en paz. Lo que ha pasado en Barcelona está completamente fuera de la religión".

Los musulmanes residentes en la comarca coinciden en "tienen miedo" de que los atentados de Cataluña desaten una ola de Islamofobia en España. Así lo explica Hind Jriria, peluquera de profesión, casada y madre de dos hijos que vive desde hace 17 años en Langreo. "Estábamos en Marruecos de vacaciones cuando nos enteramos de lo que había pasado en Barcelona y me dolió mucho. Es algo que da muy mala fama a nuestra religión, que no dice nada es estas cosas", indicó Jriria, que confesó que "me dio miedo volver aquí por si podía pasaba algo. La gente en la cuenca es muy amable, pero siempre hay algunos que te preguntan por qué te poner el hiyab y cosas parecidas".

Insultos

María Ignacio Villegas, esposa del imán de la mezquita de Oviedo, Mohamed Mamoun Barakat, no quiso perderse la concentración de ayer en Sama. "Lo que queremos dejar muy claro es que el Islam no es terrorismo ni los musulmanes son terroristas y esta gente que comete estos actos no tiene nada que ver con el Islam. Estamos totalmente en desacuerdo con esto y además es algo que nos está perjudicando mucho". En la misma línea, expresó que "yo, como española musulmana, cuando hay atentados procuro no salir a la calle en un par de días porque hay algunos que nos insultan".

Esta ovetense puso como ejemplo lo ocurrido en la Feria de Muestras de Asturias, en Gijón, hace unos días. " Estaba trabajando en la feria con mi hija. Las dos llevábamos el hiyab y alguna gente que pasaba por delante te decía: "Mira esta terrorista, ¿también te vas a inmolar como ellos? Fue algo muy triste".

"El buen musulmán" -prosiguió María Ignacio- "jamás cometerá un acto de este tipo, jamás. De hecho, en Siria, son los propios musulmanes los que están huyendo de está gente".

María Ignacio también anunció que la comunidad musulmana de Oviedo celebrará una concentración de rechazo a los atentados este viernes en Vallobín a partir de las 9.00 horas.