Brañella organizó ayer una gran fiesta infantil. Alrededor de trescientos niños de San Martín del Rey Aurelio participaron en la XVII Concentración escolar, con la que se inició la última jornada de las fiestas del Cristo de la Paz en Brañella. Los autobuses desplazaron a los alumnos desde los diferentes centros educativos hasta la localidad para disfrutar de la tarde.

En la carpa asistieron a un espectáculo de magia y pudieron disfrutar de una chocolatada con churros y de una lluvia de caramelos. El desfile de la bandina de gaitas del valle del Nalón dio paso a la jira campestre, donde los romeros pudieron degustar variadas viandas, con el bollo preñao repartido por los promotores de los festejos entre los socios como protagonista.

En el escenario, comenzaba el XV Festival de Canción Asturiana, que contó con las actuaciones de Liliana Castañón, Juan Robledo y José Manuel Reguero junto con la pareja de gaita y tambor formada por Valentín Fuente y Joaquín Areces. Quedaban todavía muchas actividades por delante en unas fiestas en las que las inclemencias meteorológicas no restaron afluencia.

A continuación, se inició la tercera y última verbena de los festejos, en la que se celebró el tradicional baile de la escoba. Brañella, que cuenta con sólo cuatro habitantes, tiene un proyecto socio-cultural respaldado por más de 1.000 socios. Año tras año organizan unos festejos repletos de actividades para todos los públicos. No faltaron este año la corderada a la estaca y el concurso de repostería junto con la procesión y la misa.

Los organizadores de las fiestas programaron también actividades deportivas, entre ellas el doble maratón solidario, promovido por Héctor Moro, y las marchas de BTT y senderismo. Hubo un encuentro literario con el escritor León Arsenal y encuentros de bolilleras y de patchwork.