La sede del Centro de Rehabilitación en Drogodependencias (RED) de Mieres, gestionada por la entidad "Buenos Amigos", ha sufrido dos robos en algo más de una semana: el primero se produjo el anterior fin de semana y en la madrugada de ayer se registró otro asalto. La Policía Nacional busca al conductor de la moto que persiguió a un autobús municipal en Mieres, y que llevaba "de paquete" a un hombre que portaba un hacha, como presunto autor de estos asaltos y otros hurtos en el concejo. El hombre que iba armado fue detenido, por atentado a la autoridad y por su "actitud amenazante". Fue puesto en libertad con cargos y las diligencias en manos de la autoridad judicial. Desde el centro RED confirman los asaltos y agradecen la "excelente labor" de los agentes de la Policía Nacional.

El ladrón forzó la puerta, en las dos ocasiones, para acceder a la sede de RED. En el primer asalto, el botín fue grande: se llevó del lugar varios ordenadores y otros objetos de valor. El asalto de la noche del martes se saldó con las pérdidas por los daños ocasionados en la puerta y otros desperfectos, aunque durante el asalto no se sustrajo nada: ya se lo habían llevado todo.

Los responsables del Centro de Rehabilitación en Drogodependencias cursaron las denuncias: "Estamos muy agradecidos de la colaboración y la empatía que hemos encontrado en la Policía Nacional de Mieres", afirmaron desde la entidad. Los agentes trabajan ya en la investigación que, según fuentes oficiales, está ligada a otros sucesos en el concejo.

El asalto a las instalaciones de RED no ha sido el único en los últimos días. Según la Policía Nacional, también se ha producido el intento de robo de cable eléctrico en una instalación deportiva y asaltos a varios garajes. Y la Policía sospecha que los sucesos pueden tener la misma autoría. El avance de las indagaciones ha hecho que ahora la Policía busque a un vecino de Mieres, con problema de adicciones. Es el hombre que condujo la moto que persiguió al autobús de la línea que une el valle de Turón con el centro de Mieres.

La persecución empezó en La Reguerona, en Santullano. Dos hombres que iban en moto le preguntaron al conductor si ese era el autobús que bajaba de Turón, a lo que el chófer respondió que sí. Sin mediar más palabras, el hombre que iba de paquete sacó un hacha de la cintura del pantalón y se dispuso a subir al bus, pero no pudo porque el conductor cerró las puertas. Pidió a gritos que alguien llamara a la Policía: un pasajero marcó el 091 y ofreció detalles sobre lo que estaba ocurriendo. El autobús cambió la ruta y se dirigió con rapidez al centro del casco urbano, a la parada del Ayuntamiento. Allí esperaban agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional. El hombre que estaba armado fue detenido poco después, en la calle Pablo Picasso (barrio de Santa Marina). La Policía busca ahora al otro hombre.