El colegio Público Clara Campoamor de Riaño descubrió ayer la placa que reconoce su excelencia educativa en la promoción de la igualdad en medio de una jornada festiva donde los 120 niños del centro se convirtieron en protagonistas.

"Todos somos distintos pero iguales", es el mensaje de la canción que entonaron todos los alumnos a coro tras el descubrimiento de la placa en la fachada del colegio.

Con sus mejores galas los pequeños recibieron a las autoridades que acudieron al acto de este primer distintivo que entrega el Ayuntamiento de Langreo. La propia concejala de Igualdad, Blanca Pantiga, destacó el gran despliegue que el colegio preparó ayer para recibir su distintivo. "Esto parecen los Premios Princesa porque vaya nivel", manifestó en su intervención.

"La educación es el mejor arma para luchar contra la discriminación por razones de sexo", continuó Pantiga. Y este centro langreano de Infantil y Primaria es el mejor ejemplo. El claustro, encabezado por la directora, Marta García, preparó un perfecto resumen de lo que es su trabajo en este área. Primero se proyectaron una serie de fotografías con todas las actividades del colegio que le han hecho merecedor de este premio por su proyecto educativo. Entre ellas destacaron algunas en las que los niños trabajaban sobre diversas figuras femeninas como la científica Margarita Salas o la tenista Arancha Sánchez Vicario.

A continuación, nueve niños, uno de cada clase, recitaron el cuento de "Los Colores". Una reflexión sobre la importancia de romper con los roles de género. Marta García quiso compartir cómo este premio "refuerza" a los profesores para "seguir trabajando en lo que creen". Además, realizó una llamada para que su trabajo "traspase los muros del colegio". "La coeducación es una forma de ser, vivir y sentir", añadió. En el Clara Campoamor lo están consiguiendo, ayer eran más de un centenar de familiares los que acompañaban a los alumnos en un día tan especial.

"Nunca olvidéis vivir como personas, independientemente de que seáis chicos o chicas", se dirigió la edil Blanca Pantiga a los niños. Y las niñas.