- ¿Sabes ya lo que vas a decir, "Maricuela"?

-No, yo nunca lo preparo. Yo hablo con el corazón.

Ángeles Flórez Peón, "Maricuela" (Blimea, 1918), miliciana durante la Guerra Civil, prisionera en Santurrarán (Guipúzcoa) y exiliada en Francia para salvar la vida, recibió ayer el galardón "Pozu Fortuna". El premio se entrega cada año en el entorno del pozo mierense, una de las fosas comunes más grandes de Asturias. Aunque de camino al valle de Turón aún no tuviera el discurso preparado, sus 99 años hablaron con claridad sobre el escenario: "Quiero que la izquierda se una, que os unáis todos para que ganemos". Y lo dijo en una edición con público diferente: por primera vez en los últimos años, había una amplia representación del PSOE entre los asistentes. Estaba encabezada por el secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Adrián Barbón. Juntos así en un acto en el que Izquierda Unida lleva la batuta, con el alcalde de Mieres, Aníbal Vázquez, al frente.

Pero si hubo una protagonista fue, sin duda, "Maricuela". Dice que los 99 años no le pesan, porque por fin puede disfrutar. "Yo no tuve juventud ni niñez, me la robaron", afirmó. A su hermano lo mataron en la Revolución del 34. Luego ella, con 17 años, fue al frente. Salvó la vida de milagro, pero terminó con un consejo de guerra y en la cárcel de Santurrarán. A los 29 años, con una hija, huyó a Francia para salvar la vida: "A todos los muertos que vi, a todos los que fusilaron, a todos los que dieron la vida por la libertad, les dedico este galardón", dijo emocionada. El alcalde de Mieres, Aníbal Vázquez, y el presidente de la Fundación "Pozu Fortuna", José María Prieto, le entregaron el premio. El concejal de Memoria Democrática de Mieres, Faustino Zapico, presentó el encuentro. "Yo no sé si la llegaré a ver, pero lo que quiero es una República", finalizó Flórez Peón su intervención.

"Nosotros no podíamos faltar hoy, venimos a rendir recuerdo porque no podemos olvidar a estas personas. Y no podemos olvidar que la defensa de la libertad, de los derechos humanos, costó muchas vidas", afirmó Adrián Barbón. Añadió que "queremos recordar a todos los que no tienen nombre".

Aníbal Vázquez, durante su intervención en el escenario, afirmó que "la transición no será completa hasta que no se saquen a todas las personas que están en las cunetas". "Nos debemos a todos los que peleaban contra los que se habían levantado en contra de la legalidad". José María Prieto recordó a todos los asesinados y también a tantas familias que nunca supieron dónde llorarlos. Para ellos, ayer, lanzaron flores al "Pozu Fortuna". El ramo más grande fue el de "Maricuela".