El gobierno de Mieres (IU) manifestó ayer su "frontal rechazo" al proyecto que maneja el Principado, en colaboración con Hunosa, para quemar combustible producido a partir de residuos en la central térmica que la empresa estatal tiene en La Pereda. La concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Delia Campomanes, no sólo anunció que el Ayuntamiento presentará alegaciones a la polémica iniciativa, sino que atacó con dureza al Principado y lo hizo rechazando tanto las formas como el fondo de la novedosa planificación: "No queremos residuos en Mieres y menos si llegan a través de un acuerdo opaco que se ha tomado sin contar para nada con el Ayuntamiento, que ni tan siquiera ha sido informado". Así, el vicealcalde del concejo, Manuel Ángel Álvarez, matizó que "no asumiremos que nos intenten colar una incineradora encubierta".

Los gestores municipales de IU dejaron ayer patente que su rechazo a la quema de basura no reciclable en La Pereda es más que firme. En este punto no hay posibilidad alguna de entendimiento con el Principado. Además, el gobierno local argumenta desde varios razonamientos. "Por una lado apostamos por los objetivos de la Unión Europea de caminar hacia el objetivo de cero residuos", remarcó Campomanes. "Sabemos que se trata de un reto a largo plazo, pero este Ayuntamiento está desarrollando todas las iniciativas que tiene a su alcance para caminar en esa dirección". En este, sentido cabe recordar que Mieres impulsó la recogida selectiva de materia orgánica doméstica a principios de 2015. El objetivo local era adaptarse a la ley europea que plantea la necesidad de poner en marcha medidas para ir incrementando de manera gradual hasta 2020 el volumen de biorresiduos recogidos de forma separada. Actualmente la cobertura llega a 807 familias del municipio o, lo que es lo mismo, a una población estimada de 1.933 vecinos.

Las consecuencias

Delia Campomanes también remarcó ayer la preocupación del gobierno local ante los problemas de contaminación que podría generar la quema de residuos en la central de Hunosa: "Queremos evitar cualquier tipo de impacto ambiental", indicó la concejal. Y añadió: "En este momento no existen estudios serios sobre las consecuencias que puede tener este tipo de actuaciones".

El gobierno de Mieres pidió al Principado que "recapacite". De igual forma, el Vicealcalde lamentó la falta de transparencia de la administración regional: "Poco antes de que se hiciera público este proyecto tuvimos una reunión en la Consejería y no se nos dijo nada", recalcó Álvarez. Los dirigentes de IU anunciaron que defenderán los intereses de los vecinos. En estos momentos ya se puede hablar de un doble frente, vecinal y político. Y es que la plataforma antitérmica de La Pereda ha mostrado también su pleno rechazo al proyecto . El colectivo afirman sentirse "muy preocupado", sobre todo, "por el efecto que podría tener sobre la contaminación de una zona que de por sí ya tiene unos niveles altos de contaminación, con lo que no creemos que mejore la calidad del aire, sino todo lo contrario". Por eso, su intención es presentar alegaciones, como también hará el Ayuntamiento.