Tamara Argüelles, la concejala langreana destituida de su cargo tras dar orden a personal municipal de ir a buscarla en coche al trabajo en Oviedo para asistir a dos comisiones municipales, pide que se produzca un debate sobre el cese en el seno del Partido Comunista (PC) y de Izquierda Unida (IU). La edil, que tenía delegadas las competencias de Cultura, Educación y Política Lingüística, considera que es la base de estas organizaciones quien "tiene que analizar la situación" ya que "es quien decide cuáles son los integrantes de las listas".

El alcalde de Langreo, Jesús Sánchez, destituyó de su cargo a Tamara Argüelles por "pérdida de confianza" después de que la edil fuese trasladada a reuniones del Ayuntamiento en un coche de los servicios municipales desde su puesto de trabajo. Esta situación se produjo en dos ocasiones y provocó que el Alcalde, al conocer lo que había ocurrido, la conminase a que "no volviese a utilizar el vehículo municipal". La resolución del regidor en la que retiró las competencias a la concejala de IU, de su misma formación, que fue además secretaria general del Partido Comunista de Langreo durante un año, fue firmada el viernes.

El martes, poco antes de la celebración de la sesión plenaria en la que se aprobó la modificación de los impuestos municipales para el próximo año, la edil aseguró que "dimitía y amenazó con no acudir a un pleno importante" en el que se analizaron los impuestos, aseguró el Alcalde. Estas dos circunstancias unidas llevaron al regidor a quitar tres días más tarde las competencias a Tamara Argüelles, que no dimitió y acudió a la sesión plenaria, en la que emitió el mismo voto que sus compañeros. El regidor asumió las delegaciones de Cultura, Educación y Política Lingüística que ostentaba Argüelles.

Su voto era necesario en la sesión plenaria dado que si la oposición votaba en contra de la subida de las tasas municipales, como así ocurrió, el equipo de gobierno no lograría sacarla adelante dado que estaba previsto que se hiciese efectiva la renuncia de Vanesa Llaneza, concejala de Somos, por motivos personales. Finalmente, Llaneza, tras la petición realizada por el Alcalde ante la situación generada, decidió seguir ante la minoría en la que podría quedar el equipo de gobierno municipal de cara a la aprobación de los presupuestos municipales del próximo año, que está previsto que se debatan en pleno antes del próximo martes.

El ejecutivo municipal está compuesto por once concejales (seis de IU y cinco de Somos) y la oposición (PSOE, PP y Ciudadanos) suman diez. Sin el voto de Tamara Argüelles las fuerzas se equilibran aunque si quedasen con los mismos votos cabe la posibilidad de que se tenga que recurrir al voto de calidad del Alcalde para aprobar las cuentas municipales. Ese sería el mejor de los escenarios posibles para el equipo de gobierno municipal, que ve como la aprobación del presupuesto de 2018 está aún en el aire al desconocer cuál será la postura que adoptará Tamara Argüelles a raíz de los últimos acontecimientos.

No obstante, esta situación provoca inestabilidad en el equipo de gobierno. La edil no tiene ninguna competencia en el equipo de gobierno aunque sigue perteneciendo al grupo municipal de IU. El Alcalde considera que la actuación de Tamara Argüelles "no se corresponde con el comportamiento ético exigido" y destacó que "cobra dietas por asistir a las comisiones y a los plenos". El regidor langreano defiende que la edil tendría que "dimitir y abandonar el grupo municipal". Ayer, se celebró una comisión municipal de Servicios Sociales y Cultura en el Ayuntamiento, en la que Tamara Argüelles ya no estuvo presente y fue sustituida por Paula Díaz.