Casi Medio centenar de trabajadores de Sadim Ingeniería, una de las filiales de diversificación de Hunosa, se enfrenta a una drástica decisión por parte de la compañía. El comité de empresa denunciaba ayer los planes de la hullera de aplicar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de 15 meses para la totalidad de la plantilla -a excepción de los directivos y gerentes de área- que supondría la reducción de la jornada a la mitad. Además, paralelamente, la empresa también pretende aplicar una "modificación sustancial de las condiciones de trabajo", lo que significa, tal y como aseguró el presidente del comité, la eliminación de todos los complementos salariales a excepción de la antigüedad. Según las fuentes consultadas por este diario, Sadim Ingeniería cerrará el año con una deuda cercana al millón de euros.

"La empresa nos abre un ERTE para 41 trabajadores de reducción de jornada laboral a la mitad, y por si fuera poco, nos plantean la eliminación de todos los complementos salariales que no sea el sueldo base y la antigüedad", indicó José Luis Liébana, presidente del comité de empresa, que denunció que en las dos semanas de negociación "la empresa no ha cedido nada". "Nos queda una reunión el jueves, y estamos viendo que no va a haber solución", confesó.

El presidente del comité aseguró que "todos los trabajadores entendemos que es inviable que una empresa como Sadim Ingeniería, que se dedica a dar servicios, pueda trabajar a tiempo parcial de media jornada, porque no podremos hacer nuestro trabajo a clientes". "No tenemos una actividad productiva, no fabricamos nada, y una cosa es que quieran aplicarnos algunos ajustes para mejorar la situación de la empresa y que nos propongan buscar más trabajo o líneas de negocio, pero de ahí a plantearnos las medidas que ponen sobre la mesa nos dejan en una situación que prácticamente no podemos dar servicio a los clientes que tenemos", valoró Liébana.

"Estamos pagando el pato de las malas gestiones anteriores", criticó el presidente del comité. "En 2013 despidieron a 7 compañeros, pero como tenemos unos cargos estructurales de empresa pública demasiado grande, eso tiene un coste alto y no se consiguen paliar con la carga de trabajo que tenemos, que es alta en ocasiones pero que fluctúa mucho", explicó. "La única solución que nos plantean es que el ERTE sea flexible para poder dar servicio a los clientes internacionales, pero es algo que no nos parece lógico", valoró.

El responsable sindical agregó que "nos han dejado con una muy mala gestión, y esto se venía venir y no han querido tomar medidas". "Somos una plantilla de 41 personas, con una media de edad de 40 años, y que quedamos en una situación muy complicada", aseguró Liébana, que denunció que "les hemos pedido que nos presenten un plan de viabilidad por escrito y lo han rechazado". De hecho, el comité de empresa denuncia que la respuesta de la empresa cuando se les pregunta por el futuro después de aplicar las medidas que plantean es "que Sadim puede cerrar".

El comité de empresa, que confiesa que la medida ha supuesto un duro golpe para la plantilla, no descarta poner en marcha movilizaciones en las próximas semanas.