Las obras de reforma del edificio de servicios múltiples de Riaño, donde se instalará el gimnasio, terminarán en dos semanas. Es la última actuación de acondicionamiento que se acomete en el complejo, tras finalizar los trabajos en el polideportivo. Previamente se repararon las piscinas al aire libre, que abrieron los últimos veranos, y las pistas de tenis.

Una vez finalizados los trabajos en el edificio de servicios múltiples se tendrá que instalar el equipamiento del gimnasio, aseguró el concejal de Deportes, José Alberto Caveda, que prevé que pueda estar en funcionamiento en marzo. La partida destinada por el Principado para recuperar el complejo deportivo de Riaño antes de la cesión de la propiedad al Ayuntamiento de Langreo, de 600.000 euros, no llega para comprar las máquinas del gimnasio. Por eso, el Consistorio ha consignado en el presupuesto municipal de este año alrededor de 30.000 euros para esta adquisición. "Estamos estudiando las ofertas del equipamiento para decidir si optamos por alquilar o comprar", indicó el concejal responsable del área de Deportes. La apertura a los usuarios del gimnasio y del polideportivo, que hasta ahora sólo está siendo utilizado por algunos equipos, está pendiente del traslado del personal municipal necesario para el funcionamiento de las instalaciones. Inicialmente el gobierno local prevé que un trabajador como mínimo se ocupe de las dos dependencias. Hasta que no se traslade al personal el polideportivo continuará cerrado.

A estas nuevas instalaciones deportivas langreanas, se unirá la cancha y la bolera del parque Pinín, en La Felguera. Unas instalaciones que se construirán en el lugar que ocupa el minigolf, que desaparecerá, apuntó el edil. El Consistorio adjudicó la obra por 24.667 euros. "Los niños tendrán un lugar para jugar", indicó Caveda sobre la cancha, que dispondrá de porterías y canastas.