El Ayuntamiento de Mieres pretende evitar que el viejo chalé de la calle Numa Guilhou que compró en 2009 para abordar el desarrollo del fallido Museo de la Toná acabe por desmoronarse. El gobierno local tiene previsto ejecutar en los próximos meses la rehabilitación integral del tejado del inmueble. Debido al avanzado estado de deterioro de la techumbre, el coste de la actuación se estima en algo más de 100.000 euros.
La intención del gobierno local es abordar a lo largo de este mismo año la rehabilitación del tejado del histórico inmueble. El principal problema es que la actuación requiere de una importante cobertura económica, ya que será necesario reconstruir toda la estructura. Los responsables municipales, a la espera de poder concretar el proyecto de obra, estiman que el gasto superará los 100.000 euros. Incluso podrían quedarse cortos. El último gobierno local del PSOE había llegado a redactar el proyecto, pero nunca se llegó a licitar. La intervención estaba presupuestada en 120.000 euros, una inversión que estos últimos años resultaba prohibitiva para las arcas municipales. Ahora, con las cuentas más saneadas, el Ayuntamiento considera que la actuación no se puede demorar más en el tiempo.
El vicealcalde del concejo, Manuel Ángel Álvarez, remarcó el compromiso del gobierno local a la hora de mantener en pie el chalé de la calle Numa Guilhou. El problema de este edificio es que se ha convertido en prácticamente un artículo de lujo debido a la enorme cantidad de gasto que ha generado a las arcas municipales.
La intención inicial del Ayuntamiento era adelantar el pago de los 180.000 euros y sufragar luego la compra del edificio con fondos mineros. Sin embargo, la supresión de las ayudas al carbón hizo que el coste de la compra del chalé de la calle Numa Guilhou haya terminado recayendo únicamente en el Consistorio.
El proyecto museístico que estaba previsto abordar en el inmueble ha quedado fuera de la agenda municipal, por lo que el edificio lleva ya siete años abandonado. Ahora serán necesarios otros 100.000 euros para reponer el tejado. Es decir, al final del proceso se habrán gastado cerca de 300.000 por un edificio sin uso y que aún debería ser sometido a una rehabilitación integral para poder darle ocupación.
El histórico chalé, ubicado en el número 42 de la calle Numa Guilhou de Mieres está incluido en el Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias concretamente desde abril de 2007. Por lo tanto, se trata de inmueble protegido. El edificio fue construido en los años 1922 y 1923 y fue proyectado por el arquitecto de origen vasco Teodoro de Anasagasti y Algán (1880-1938).
Este arquitecto, vinculado al grupo de profesionales de la revista "La Construcción Moderna" fue llamado a la villa mierense en tiempos en los que gobernó el alcalde socialista Manuel Llaneza, en la década de 1920, para colaborar en un ambicioso plan de obras públicas.
