Los vecinos de Aller dicen "basta" a las cacas de perro. Aseguran que hay zonas del concejo que están "impracticables" por la cantidad de excrementos de mascotas que no se recogen: "Está invadido de excrementos", lamentan. Es el caso del paseo entre Moreda y Oyanco, donde los vecinos consideran que "estamos muy cerca de tener un problema de salubridad". El gobierno local, no obstante, anunció hace unas semanas un programa de concienciación al que seguirán sanciones. Pueden alcanzar los 3.000 euros en los casos graves.

"Caminar sin pisar una caca de perro por algunos puntos del concejo es prácticamente imposible", afirmaron fuentes vecinales. Los vecinos consideran que "es necesario incrementar la vigilancia. Por muchas campañas de concienciación que haya, parece que sólo aprenderán a la fuerza". En 2013, durante una campaña de vigilancia, el Ayuntamiento sancionó a dos vecinos del municipio por no recoger las cacas de sus mascotas. Las sanciones ascendieron a 720 euros.

Moción del PP

La polémica por los excrementos tiene eco también entre la oposición. El grupo municipal del PP presentará una moción al próximo Pleno para reclamar más vigilancia entre los que pasean con sus mascotas. El portavoz de la formación, Juan Antonio del Peño, explicó que "también requerimos un plan de limpieza integral". Y ponen especial atención en los contenedores: "Nos están llegando quejas de lo sucios que están los cubos, por lo que pedimos su limpieza o que se repongan en el caso de que sea necesario". Es una actuación "urgente", afirmó Del Peño, porque "la situación empeorará durante el verano".