La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El declive industrial sin fondo de las Cuencas

Las grandes compañías que iban a paliar el cierre de minas, como Rioglass o Triman, sufren serios problemas

La factoría de Rioglass Solar, en la que se plantea un ERE. FERNANDO GEIJO

Las comarcas mineras atraviesan por uno de los momentos más delicados de su historia. Los sindicatos afirman que seguramente el peor. Y en buena medida por la falta de alternativas de empleo para compensar los puestos perdidos con el paulatino cierre de la minería. Los fondos para la reconversión industrial de los valles mineros no dieron el fruto deseado, y un gran número de proyectos que se iniciaron con ilusión son hoy naves cerradas a cal y canto. Hay algún oasis en el desierto, pero el saldo siempre alumbra números rojos en la cuenta de las Cuencas. Los últimos golpes a la línea de flotación de la comarca del Caudal, con los cierres de Mieres Tubos y Triman y el ERE en Rioglass, supone que 200 trabajadores se vayan a casa. En el Nalón, pocas son las compañías nacidas al albor de los fondos mineros que hoy permanecen activas. Incluso Sadim Ingeniería, compañía de diversificación participada por la pública Hunosa, ha tenido que recurrir a un ERE. Para los sindicatos comarcales, la única salida es la concienciación social del problema y la lucha. En caso contrario, "las Cuencas serán un solar".

Los secretarios generales de las uniones comarcales de UGT y CC OO en el Caudal, Sergio Álvarez y Sergio Vicente, realizaron una radiografía del estado actual de la comarca del Caudal, aunque valoran que es perfectamente extrapolable a la del Nalón. "Nos tememos que llegó el lobo de verdad, y la situación es la peor de la historia", señalaban los responsables sindicales, basándose en varios ejes. Por una parte, la minería: a 31 de diciembre, las minas deberán cerrar y el futuro es de lo más incierto en este sector. Y fuera de él, la situación no pinta mejor. "Día tras día estamos viendo empresas que se están cerrando. La última fue Triman, pero antes fue Mieres Tubos y ahora Rioglass va a un ERE", explicaron. Si analizan empresas con un "cierto nivel de empleo", las cuentan con los dedos de una mano: "quitando Thyssen y Asla en este momento, las demás están reduciendo puestos de trabajo y salarios".

El último problema empresarial ha surgido en Rioglass Solar, que tiene dos factorías en la comarca, una en Villallana (Lena) y otra en el polígono de Sovilla (Mieres). La dirección de la empresa ha firmado un expediente de regulación temporal de empleo para sus más de cien trabajadores, alegando la falta de pedidos que les aseguren una mínima carga de trabajo. El expediente se prologarán durante lo que resta de 2018, y la dirección, según lo que le ha transmitido al comité, espera cerrar algún contrato para el próximo año que permita revertir la situación. Pero mientras eso llega, la realidad es que más de un centenar de operarios están regulados.

Apenas unos días antes, la que paraba su producción era la empresa Triman Minerals, que también tiene dos factorías, en este caso ambas en Mieres. La compañía, que llevaba dos décadas asentada en la comarca, ya había superado algunos problemas, pero esta vez está siendo más complicado. La treintena de trabajadores de la empresa esperan en sus casas la formalización del ERE que la firma, que también está en preconcurso de acreedores, tiene previsto presentar. La otra gran factoría de la comarca que en el mes de abril vio truncadas sus aspiraciones de supervivencia fue Mieres Tubos. Tras casi tres años de problemas, al final se optó por la liquidación de la firma, que ha dejado en la calle a los 50 trabajadores que le quedaban en plantilla. Y en el Nalón, el último caso ha sido el de Sadim Ingeniería, filial de Hunosa, que en enero regulaba a sus 40 trabajadores, en un expediente en el que les rebajaba la jornada laboral y los salarios. Algunos de los operarios, según ha podido saber este diario, ya han salido de la compañía.

Excepciones

Y entre tantas malas noticias, pequeños oasis. Por un lado, Asturiana de Laminados, que además de finalizar este año con la ampliación de su factoría de Lena, que dará trabajo a hasta 80 personas en tres años, también baraja un proyecto para Reicastro. Por el otro, KPS Solutions, ubicada en Morcín, que también ha ampliado su planta, que inaugurará a finales de mes.

Compartir el artículo

stats