El polideportivo de Oñón estuvo el año pasado muy cerca de ser clausurado. El gobierno local valoró muy seriamente cerrar este histórico equipamiento para trasladar su actividad a las instalaciones deportivas del campus de Barredo. La fallida negociación con la Universidad de Oviedo traerá consigo alargar la vida al vetusto polideportivo. Y es que el gobierno local de IU anunció ayer que este mismo verano abordará actuaciones de mejora en las instalaciones, muy deterioradas por la falta de mantenimiento, lo que ha generado constantes quejas por parte de los usuarios.

El Patronato Municipal de Deportes prevé acometer este verano actuaciones de pintura y acondicionamiento no sólo en Oñón, si no también en el poli de Turón. Además, el gobierno local proyecta una "obra integral" en la zona de vestuarios de Oñón. Se trata, explicaron ayer portavoces municipales, de actuaciones de "mantenimiento y mejora con el objetivo de adecuar las instalaciones, pintarlas, eliminar humedades y abordar mejoras en general". Obras que se desarrollarán en verano "teniendo en cuenta que es la época de menos actividad deportiva oficial y en la que menos molestias se causa a las personas usuarias". La planificación ya se ha tratado en la junta rectora del Patronato para iniciar toda la tramitación administrativa necesaria "para desarrollar el proyecto y las obras que permitirán la mejora integral que necesita la instalación por su antigüedad y el importante uso que se hace de ella".

Las carencias que presenta el polideportivo de Oñón son conocidas desde hace ya bastante tiempo. Para empezar la techumbre de la pista central de la instalación tiene graves problemas de goteras, lo que en ocasiones ha impedido el desarrollo de competiciones oficiales. Los vestuarios están en mal estado, así como otros espacios como el gimnasio.