El director de la Casa de la Buelga de Ciaño, Aladino Fernández, fue el encargado de introducir la conferencia que impartió Xosé Antón González Riaño y que versó sobre "Llingua asturiana: la oficialidá q'Asturies necesita" . La charla fue organizada por la Asociación Cauce del Nalón, que contó con la colaboración del Ayuntamiento de Langreo, la Universidad de Oviedo y el Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.

Fernández trazó la trayectoria personal y profesional del ponente, Profesor titular de Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Oviedo, destacando que atesora "un currículum extraordinario y lleno de méritos" entre los que se encuentran la elaboración de numerosísimos artículos y trabajos que le valieron en el año 2005 el Premio Nacional de Investigación. Del mismo modo, mostró su convicción de que "no hay mejor medida de protección de la llingua que declarar su oficialidad".

El presidente de la Academia de la Llingua Asturiana (ALLA) inició su conferencia dejando claro que la misma partiría de "reflexiones íntimas" y apostillando que en ningún caso hablaría desde el punto de vista académico sino personal, "dejando patente lo que creo y pienso sobre la oficialidad del asturiano". González se mostró convencido de que es posible "convencer a los escépticos", ya que no estamos ante una cuestión impositiva ni se trata de "obligar" a nadie. En definitiva "al defender la oficialidad se está reclamando de que los ciudadanos puedan ejercer la libertad lingüística tal y como se recoge y está previsto en la Constitución". González subrayó que no tiene sentido preocuparse por el coste económico que supondría implantar la oficialidad, ya que "somos una comunidad de una sola provincia, que tiene una sola universidad y pocos concejos" y en todo caso, estaríamos hablando del 0,5 por ciento del presupuesto del Principado. Además, según destacó "una parte de ese gasto revertiría económicamente en Asturias gracias a que se potenciarían sectores como el audiovisual, el tecnológico, el turístico o el editorial".

El ponente no pasó por alto la necesidad de que el funcionariado profundice en el conocimiento del uso oral y escrito de la llingua, pero siempre haciéndolo "dentro de un proceso gradual y asumible" y abogó por garantizar la formación básica del asturiano, configurándolo como una "asignatura de libre configuración autonómica", algo que, según aseguró, posibilitará que "esa formación esté al alcance de todos los alumnos antes de que estos lleguen a la Universidad, donde podrán acceder a los estudios de asturiano, que ya están homologados académicamente". En cuanto a los medios de comunicación, González defendió la posibilidad de incentivar la presencia del asturiano en los medios de financiación privada, y respecto a los públicos (en concreto RPA y TPA), reclamó que el objetivo sea un uso "paralelo" al castellano, logrando que en todo caso en la programación convivan ambos, para lograr que la sociedad no sienta que ambas lenguas "están compitiendo, sino que en todo caso, pueden convivir, porque se complementan". En definitiva, y tal y como refrendó el conferenciante para finalizar, "Asturias no necesita una oficialidad paródica, porque ésta ha de ser adecuada a nuestra situación, respondiendo a nuestras necesidades, que son mucho más sencillas y abarcables de lo que creemos, y en todo caso, se trata de dignificar y poner a salvo no solo nuestra lengua sino también nuestras raíces y nuestra cultura".