La emigración asturiana mantiene por lo general acciones de grandeza y esfuerzo empresarial en muchos lugares de allende el Atlántico. Y en México especialmente. Sin embargo, en una de las zonas menos mexicanas del país azteca, Baja California, un territorio peninsular cálido, pleno de playas de arena fina, un atrevido mar Pacífico, espacio desértico y mucha pesca, fue el lugar donde el joven emigrante Luis Bulnes Molleda decidió forjar su aventura empresarial y familiar tras varios trabajos como almacenista, administrador general y agente viajero por todo el país mexicano de las industrias de Antonio Llano Pando, otro asturiano de empresa que le ofreció su puesta en escena laboral. En este tiempo de notable trabajo recorriendo casi todos los estados de la Unión Mexicana fue para Luis Bulnes Molleda «una gran experiencia y su auténtica Universidad», lo solía señalar con frecuencia.

A últimos de los años cincuenta la empresa Pando lo envía a Cabo San Lucas, a la envasadora atunera Calmex, donde ejerció de gerente de producción. En esta ciudad de Baja California desarrolló otros trabajos dentro del conglomerado empresarial de la familia Pando como gerente de las Bodegas Santo Tomás. Nuevamente como director de la empacadora de atún logra una producción en la planta sorprendente con dato elocuente. De 14.000 cajas de atún al año pasa a 400.000, una cifra que sitúa a esta empresa en lo más granado de la industria pesquera mexicana.

Corría el año de 1968 cuando Luis Bulnes Molleda deja las industrias Pando con un bagaje notable de efectividad y gestión financiera. Es entonces cuando se decide a convertirse en autónomo e invertir en el incipiente sector hotelero. En este tiempo comenzaba una nueva etapa en el discurrir empresarial de Baja California. De la pesca industrial se pasa al turismo aprovechando los excelentes recursos naturales que atesoran estos enclaves peninsulares mexicanos. En torno a la hotelería, este aguerrido asturiano vive momentos de esplendor en una zona emergente en el campo del turismo y tiempo libre. Es todo un promotor de la pesca deportiva en Baja California del Sur a nivel internacional. Inaugura el primer restaurante en estos contornos y funda la primera flota dedicada a la pesca deportiva: Solmar Fleet, la cual incluye el primer crucero para fines de buceo recreativo y ecoturismo, el Solmar V realizando operaciones entre las islas Revillagigedo y Guadalupe en el Pacífico mexicano. Actualmente, Cabo San Lucas es el gran destino mundial de la pesca deportiva. En palabras de Ana Laura Meza Ruiz, gerente en turno de la cadena Solmar Hoteles, «la labor que don Luis realizó aquí en Baja California no tiene palabras. Ha sido un gran benefactor, buen empresario, siempre apoyando iniciativas loables para el progreso de esta tierra y una persona amable y querida por todos. Ha dejado una huella difícil de borrar?».

Por todos los rincones de Cabo San Lucas, La Paz, la capital del Estado, y Los Cabos, la figura de Luis Bulnes Molleda se observa en las conversaciones, en las portadas de los aparcamientos, en los periódicos, en algún que otro monolito recordando su figura y sus acciones. Todo un visionario en el campo turístico que supo analizar esta corriente económica y aprovechar esa marea favorable como un auténtico emprendedor con las ideas claras y precisas. Hoy, Cabo San Lucas y aledaños es una zona mirando al mar de Cortés y al Pacífico que atrae a un turismo de altura preferentemente Norteamericano y Canadiense. Y en ese rincón peninsular de Baja California del Sur, un asturiano intrépido, fallecido recientemente, puso su particular pica y convirtió, con sus avanzadas ideas, una zona casi desértica en un oasis de magia, naturaleza y placer. Sus familiares han recogido una gran herencia con sus complejos turísticos y siguen las orientaciones pertinentes de un hombre sencillo y hecho a sí mismo que siempre llevó a Asturias en su corazón con la esencia y fervor existencial de su querido México?