El Miranda ya tiene futuro. El club avilesino vio como en diciembre pasado, y después de varios años de espera, el viejo campo de arena de Santo Domingo se convirtió en una moderna instalación de césped sintético, que le sitúa a la misma altura que otros clubes de la comarca. El presidente, Eloy Vega, afirma que la larga pelea por mejorar las instalaciones ha merecido la pena, aunque por momentos la situación haya sido desesperante. «Estamos encantados. La verdad es que viendo cómo está el panorama actual es como si nos hubiera tocado la lotería», apuntó.

El club cuenta para esta temporada con un alevín, un infantil, un cadete y un juvenil (todos en Tercera), al que hay que sumar el senior de Segunda Regional.

Al frente de la dirección deportiva está Jairo Blanco, que tiene muchas ideas para mejorar. «Sabemos que el sintético será un reclamo para muchos jugadores, por eso ahora debemos ponernos las pilas y hacer mejor nuestro trabajo. El objetivo a corto plazo es aumentar el número de equipos y por lo tanto de futbolistas, y ofrecer una mayor calidad», explicó.

El alevín está formado en su mayoría por niños de primer año y su cometido es ir poco a poco disputando los partidos para ir cogiendo experiencia para la temporada que viene. En la última jornada consiguió una victoria muy importante frente al Femiastur por 2-0, que le da moral tras haber encadenado cinco derrotas consecutivas y que le sitúa en mitad de la tabla, una posición cómoda para afrontar la recta final de la competición.

Peor pintan las cosas para el infantil. El equipo es antepenúltimo y no acaba de encontrar el camino que le haga remontar posiciones. Desde que comenzara la competición todo han sido problemas para este equipo, que a su escaso número de efectivos se le han sumado bajas importantes de última hora. En el último partido de Liga logró un empate a tres ante el Bosco, club con el que comparte las instalaciones de Santo Domingo.

El cadete sigue una trayectoria similar al alevín y está en la mitad de la tabla. Los jugadores son de primer año y muchos se han incorporado nuevos este año. A pesar de que todavía hay muchos aspectos técnicos que mejorar, los chavales están muy animados y con muchas ganas de aprender.

El juvenil es el equipo que está dando todas las alegrías al Miranda. Es cuarto en una liga en la que sube el primero de forma directa, y el segundo y el tercero promocionan. Y su objetivo es ir sumando buenos resultados para poder tener opciones de pelear por el tan ansiado ascenso a Segunda. El pasado fin de semana se pudo vivir un apasionante encuentro en el derbi entre el Bosco y el Miranda. La necesidad de victoria de los de Miranda para no alejarse de los puestos de cabeza y la casta que quería demostrar el conjunto estudiantil, deparó en un trepidante partido que se llevaron por la mínima los mirandinos por 3-4, evitando alejarse de los puestos de cabeza. Para la próxima temporada el club, contará con otro equipo juvenil resultado de las nuevas incorporaciones que la entidad ya tiene apalabradas, y todos los jugadores que cumplen en cadetes.

Jairo Blanco no puede disimular la enorme alegría de contar con el nuevo campo de césped sintético. «Es una pasada. Desde que empezamos a jugar en él, la mejoría de todos los chavales ha sido muy grande. Ahora incluso se aprecia mejor la calidad de muchos de nuestros jugadores», explicó el coordinador deportivo.

El club ya piensa en aumentar los equipos y para la próxima temporada proyecta formar varios conjuntos de sala. Un proyecto que ya está en marcha con la captación de niños en los colegios de la zona.