La Copa de España ha sido cruel con el Santa Olaya. Los dos equipos absolutos del club gijonés se han quedado lejos de cumplir el sueño de coincidir la próxima temporada en la División de Honor. Las chicas regresan a la Primera División tras finalizar últimas de su grupo, mismo lugar en el que competirán los chicos tras una actuación que no fue suficiente para poder regresar a la máxima categoría de este campeonato.

La suerte le ha sido esquiva al Santa Olaya. Las chicas viajaron a Terrassa, sede de la Copa de España de División de Honor, con la esperanza de poder hacer la machada y lograr la permanencia. Merche Peris abanderó la expedición gijonesa y recuperó su mejor versión. A la nadadora valenciana se le ha quedado corta una temporada en la que, en su fase final, ha vuelto a mostrar su mejor estado de forma. La joven plantilla olayista mostró su potencial de cara al futuro, pero la competitividad y experiencia de clubes como el Sabadell y el Canoe dictó sentencia. A todo esto hay que unirle el infortunio. Y es que Marica Strazmuester, una de las olayistas con peso específico dentro del equipo, cayó lesionado acortando las posibilidades de dar la sorpresa. Las jóvenes Margarita Álvarez Barrio, Alba Ortíz de Guinea y Celia Moro evidenciaron su evolución y mostraron el proyecto a largo plazo del club gijonés. El cuerpo técnico se muestra satisfecho con la evolución del equipo y ya trabaja para recuperar el ánimo de sus nadadoras. La próxima temporada lucharán por retornar a la tan codiciada División de Honor.

El trago más amargo lo dio el conjunto masculino, que se colocaba como uno de los favoritos para ocupar los puestos altos de la Primera División en Madrid. La actuación en la Copa de España se quedó lejos de las expectativas tras tres jornadas en las que el conjunto de Xavi Torrallardona tuvo que nadar a contracorriente desde el primer día. Miguel Payeras fue descalificado cuando se encontraba a punto de firmar una valiosa puntuación y el relevo 4x100 metros libre terminó penúltimo tras un nuevo contratiempo. Bidasoa y Covibar Rivas no perdieron el ritmo y pusieron muy caro el poder alcanzar alguna de las dos primeras plazas, las que dan derecho a ascender de categoría. Entre tanto, Marco Rivera demostró su calidad al llevarse la prueba de 1.500 libre con autoridad con un registro de 15.55,02. Cabe destacar el buen papel de Adrián Vallina en esta misma prueba y de José Antonio Téllez, en 400 metros libre. Las miradas se centran ahora en continuar mejorando las marcas personales durante el tramo final de la presente temporada.