Sevilla

El Sevilla, que recibió anoche en la casa de Mozart, en Salzburgo (Austria), el galardón que le distingue como mejor equipo de 2006 para la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol (IFFHS), ha protagonizado un auténtico milagro deportivo en cinco años, en los que ha saltado de Segunda a ser considerado el mejor equipo del mundo.

La IFFHS elabora una clasificación mensual que el Sevilla encabeza desde octubre, mes en el que destronó al FC Barcelona, basada en los resultados de todos los partidos jugados por los distintos equipos y aplicando un coeficiente corrector según la dificultad de la competición.

En la clasificación acumulada de 2006 el Sevilla ha antecedido a tres equipos italianos: Milán, Roma e Inter. El segundo club español clasificado es el Barcelona, en la séptima plaza.

El Sevilla cerró en 2006 un período de casi seis décadas sin engrosar su palmarés, ya que el último título oficial hasta entonces databa de 1948. El 10 de mayo, en Eindhoven, se alzó con el título de la Copa de la UEFA, tras batir en la final al Middlesbrough inglés por 4-0, y a finales de agosto ganaban la Supercopa europea en Montecarlo, tras superar por 3-0 al Barcelona.

En el Campeonato Nacional de Liga la trayectoria del Sevilla en 2006 ha sido igualmente impecable. En las 37 jornadas ligueras que se han disputado en el año natural, repartidas entre la temporada en curso y la pasada, los del Sánchez Pizjuán acumularon más puntos que ningún otro equipo.

Los hombres de Juande Ramos obtuvieron 79 puntos en 37 partidos, de los que vencieron en veinticinco, empataron cuatro y cayeron derrotados en ocho ocasiones. El balance goleador fue de 72 tantos marcados contra 41 recibidos.

Este ascenso del Sevilla hacia la cumbre del fútbol mundial se inició un lustro atrás, cuando el equipo entonces entrenado por Joaquín Caparrós logró el ascenso a Primera. Roberto Alés, el entonces presidente, puso la secretaría técnica en manos del ex guardameta del club Monchi, cuya política deportiva se basó en el descubrimiento de jóvenes talentos, tanto en el mercado como en la propia cantera sevillista, que desde entonces le ha dado a la selección tres internacionales absolutos y otros tres sub-21.