Gijón, J. J.
Sobre Arturo Zarauza recae la ardua labor de organizar la salida de los más de 700 jugadores que toman parte en la XIII Edición del torneo de LA NUEVA ESPAÑA.
-¿Es muy complicado?
-Es muy delicado, porque hay que identificar a los jugadores por apellido y número de licencia y no siempre facilitan los datos correctos, y también hay que actualizar los handicaps reales de los aproximadamente 700 jugadores, ordenarlos y hacer un orden de salida cada 9 minutos para cada uno de los cuatro días. Hay que tener mucho cuidado, porque como te equivoques una vez todo el horario se te va al garete.
-¿Cuánto tarda en hacerlo?
-Llevo haciendo esto desde el 2 de agosto.
-La mayor parte de jugadores trabajan, ¿suscita esto algún problema?
-También hay que tenerlo en cuenta. Hasta ahora estamos atendiendo en lo posible las peticiones de cambios de horarios e incluso de pareja, pero el año que viene ya no va a ser así. A partir de la próxima edición habrá una nueva cláusula en el reglamento en la que se indicará que el jugador que está inscrito y con el orden de salida adjudicado no podrá cambiarlo. Sí se podrá borrar, pero no cambiar. Hacemos esto porque el torneo se está convirtiendo en inmanejable.
-¿Se producen muchas bajas una vez inscritos?
-Suele haber tres o cuatro bajas en cada día y otras tantas peticiones para poder jugar que hasta ahora estamos tratando de aceptar. Sin embargo, no es nada fácil, porque muchas veces las bajas son a una hora en que los que quieren jugar no pueden.
-¿Participa mucha gente de fuera de Asturias?
-Hay que tener en cuenta que en agosto hay mucha gente veraneando, no sólo en Gijón, sino en toda Asturias, y eso se nota en el torneo. Aparte de Asturias de donde más jugadores hay es de Madrid.
-¿Al no poder mover las banderas de lugar los últimos en participar notan mucho el paso de tanto jugador?
-Lo notan, sobre todo en las inmediaciones del hoyo, el metro cuadrado más cercano al hoyo sufre mucho y es cierto que los últimos lo notan, pero es algo imposible de solucionar por mucho que se tenga cuidado. Este año tuvimos un tiempo muy bueno y creemos que el campo va a sufrir menos que el pasado.
-¿Qué tal es el comportamiento de los participantes?
-Cada vez hay más conciencia de que el campo es de todos.