Gijón, Pablo GONZÁLEZ

Andreu cumple su segunda temporada como rojiblanco. El centrocampista sólo ha podido participar en tres partidos ante el Racing de Ferrol y el Celta en El Molinón, y frente al Nàstic en Tarragona. Dos roturas de fibras en el cuádriceps le mantienen a la espera. El catalán cuenta con el alta médica, pero aún tiene molestias en un zona vital para cualquier futbolista. Además, Andreu es uno de los rojiblancos que termina contrato el 30 de junio.

-¿Cómo está?

-Todavía no estoy al cien por cien. Espero que en breve pueda estar a tope, pero me está costando bastante recuperarme. El entrenador lo sabe porque habla conmigo, de lo contrario creo que podía haber entrado en alguna convocatoria. Es una lesión en una zona un poco complicada por la manera que tengo de golpear el balón con el interior, que es cuando me molesta.

-¿Comienza a desmoralizarse ante tantos problemas?

-Este año he pasado por muchas fases. Con la segunda lesión sí que he pasado por malos momentos. Me desespero porque pasan los partidos y no puedo ayudar al equipo.

-¿Asumida y olvidada la derrota ante Las Palmas?

-Olvidada, no, sí que la hemos asumido porque hay que pensar en el Elche. Hay que cambiar la dinámica de El Molinón. No sabemos qué pasa.

-Año y medio de problemas en casa sin respuesta. ¿Cómo se le puede explicar a la afición?

-Es normal que la gente se pregunte qué nos pasa. Por desgracia he podido ver casi todos los partidos en la grada y entiendo que se pregunten que cómo se puede decir que sintamos presión. Pero no sabemos el porqué. Quizá sea porque los contrarios cambian su forma de jugar en El Molinón, pero tampoco es excusa. Llegará el momento en que no salga un buen partido y las cosas cambien. Pero es cierto que desde el año pasado nos cuesta encarrilar victorias y ser un equipo compacto en casa. Aunque recuerdo que el año pasado ganamos cuatro partidos seguidos cuando más lo necesitábamos.

-Desde Anoeta la trayectoria es descendente, quince puntos en catorce partidos. Recuerda al año pasado.

-No es la trayectoria del año pasado con cinco derrotas consecutivas, pero nos está costando más ganar partidos de forma consecutiva. Pero si ésta es la mala racha qué vamos a tener, la firmo ya. Por suerte seguimos entre los tres primeros. Si llevamos todo el año arriba es por algo. Nadie nos ha regalado nada.

-Ya no hay margen de error.

-En dos puntos hay un montón de equipos. Si perdemos y los de abajo ganan un par de partidos nos vamos a descolgar. Pero fuera lo hacemos bien y si esta semana ganamos al Elche, se quedará descolgado.

-¿Sólo saben jugar al contragolpe?

-Es nuestra mejor arma, pero no sólo sabemos jugar a la contra. Es lo mejor que nos sale por el estilo de jugadores que tenemos. Pero hay partidos que hemos controlado totalmente.

-Ya hay quien pide su vuelta y la de Pablo de Lucas para el centro del campo.

-Cuando las cosas salen mal es fácil buscar a quien no está. Cuando la racha era buena, jugamos los menos habituales y se perdió, se decía que era culpa de los que entraban. Tras una derrota se buscan siempre excusas. Me gustaría jugar, pero cuando me encuentre bien.

-¿Qué se puede decir de un equipo que ha perdido cinco partidos en casa y dos fuera?

-Muestra lo que es esta categoría. El Numancia también ha perdido varios partidos en casa pero ninguno fuera. A casi todos los equipos les cuesta ganar más en su campo que a domicilio. No sé por qué será, pero es la tónica de Segunda. La lástima es que con la afición que tenemos hagamos estos partidos.

-Aunque al final casi siempre suben los que más suman en su campo.

-Sí, es cierto. Si en casa fuésemos más regulares tendríamos mucho ganado para seguir arriba al final de temporada. Es un aspecto que hay que cambiar, pero nadie sabe el porqué, y nosotros tampoco. Tratamos de buscar soluciones.

-Sólo ha participado en tres partidos. ¿Le pasará factura a la hora de renovar?

-Está claro que sí. Si hubiera seguido la trayectoria del pasado año las cosas serían muy diferentes. Pero yo no he elegido esta situación. Ojalá que cambie y pueda volver a entrar en las convocatorias y jugar. No quiero pensar en nada porque hasta que no juegue no voy a preocuparme por la renovación. Siempre he dicho que quiero seguir en Gijón.

-Le habían hecho una oferta como al resto de compañeros que llegaron con Preciado.

-Este verano hablamos, seguimos, pero cuando me lesioné por segunda vez se paró todo. No he vuelto a saber nada. Si alguien quiere hablar con mi representante, que lo haga. No me ha dicho nada. Creo que la última vez que hablaron fue en octubre o noviembre. Siempre he tenido la confianza de Emilio de Dios y el club. Lo que me preocupa es jugar. Salvo que haga las cosas muy desastrosamente intentaremos ponernos de acuerdo para firmar un nuevo contrato.