Oviedo

Juan Carlos Navarro tuvo todo el apoyo de los Grizzlies para que en el último partido de la temporada regular pudiese alcanzar la mejor marca de triples de un debutante en la historia de NBA, pero se quedó a dos del récord.

El escenario fue el Pepsi Center de Denver, donde los Nuggets superaron por 120-111 a los Grizzlies. Navarro lo intentó pero se quedó cortó, a pesar de que fue jugador franquicia por una noche, ya que tuvo la autorización del entrenador Marc Iavaroni para que tirase todo lo que le llegaba a sus manos. Pero el escolta sólo pudo convertir cuatro triples de 14 intentos, dos menos de los seis que necesitaba para entrar en la historia. Así, totalizó 156 triples en la temporada, dos menos que los 158 que logró en la campaña 96-97 el escolta Kerry Kittles con los Nets de Nueva Jersey.

Navarro -que aún no sabe cuál será su futuro en la NBA- jugó con los Grizzlies los 82 partidos de la temporada regular y disputó una media de 26 minutos por partido, promediando 10,9 puntos, 2,6 rebotes y 2,2 asistencias por encuentro.