Montmeló (Barcelona),
Andrés VELASCO
Las primeras caras conocidas, aparte de las de los pilotos y de los jefes de equipos, llegaron ayer al paddock del circuito catalán de Montmeló. Ramón Calderón, presidente del Real Madrid, y Alejandro Agag, yerno del ex presidente del Gobierno José María Aznar, visitaron el motor home de la escudería Renault, donde accedieron a las dependencias de su director general, el italiano Flavio Briatore. Previamente, ambos habían acudido a felicitar a Fernando Alonso por su actuación en los primeros entrenamientos libres y a desearle mucha suerte de cara a la carrera de mañana.
Tras conversar unos minutos con Briatore, tanto Calderón como Agag -socio del italiano en varios negocios y como accionista del Queens Park Rangers londinense- salieron de nuevo al eje central del motor home, donde departieron con personal del equipo durante un largo rato.
Tanto Ramón Calderón como Alejandro Agag son grandes aficionados al deporte del motor, hasta el punto de que el presidente del Real Madrid comentó en su día la posibilidad de fundar una escudería dentro del club para competir en alguna de las categorías menores. El marido de Ana Aznar, por su parte, es uno de los propietarios de la escudería Barwa-Campos de GP2.
