Luanco, J. F.

El Marino recibirá el domingo a las 17 horas al Rayo Vallecano con los efectivos justos. A la rotura del tabique nasal de Guillermo se le une la acumulación de amonestaciones de Canterla y Pascual, que obligará a José Luis Quirós a acelerar la vuelta a los terrenos de juego de los tocados Miki y Pablo Lago. El partido se presenta decisivo para la certificación de la permanencia de los luanquinos. En caso de caer frente al líder, el Marino también tendría opciones de salvarse si le beneficiaran los resultados de Orense y Santa Brígida. No obstante, el objetivo es arañar al menos un empate que llene al equipo de la ansiada tranquilidad.