Oviedo, J. M. F.

Falleció ayer en Oviedo José Faustino Fernández Suárez, más conocido en el mundo del fútbol como «Pichito» y que estuvo durante muchos años ligado al Oviedo.

Había nacido el 22 de abril de 1937 en Noreña y comenzó a jugar muy joven en el equipo de su pueblo. Sus cualidades como futbolista no pasaron desapercibidas para equipos de primera fila y fichó por el Valencia, jugando en el equipo valenciano durante la década de los años sesenta.

Tras retirarse como jugador profesional, Pichito cambió los terrenos de juego por los despachos, más concretamente para ser ojeador. Llegó al Oviedo en 1977 y estuvo en el conjunto oviedista hasta 2003.

Siempre se caracterizó por su gran visión a la hora de captación de jóvenes promesas y así gracias a sus informes llegaron al equipo azul jugadores como Armando, Sietes, Oli y Santi Cazorla, entre otros muchos.

Quique Marigil, que fue jugador y técnico del Oviedo, señalaba ayer que «lo conocí en una primera instancia, cuando llegué para jugar con el Vetusta. Luego cuando volví de nuevo al club como técnico volví a coincidir con él». Para Marigil, «sabía ver muy bien a jugadores que podían ser interesantes para el club».

También llegó «a realizar informes de los equipos a los que nos enfrentábamos. Siempre me fiaba de lo que me decía». Pero lo que más admiraba de Pichito «era que te decía las cosas a las cara, era muy franco y no le importaba que no te gustase lo que te decía. Nunca te engañaba».

Javi Amieva, ahora coordinador deportivo del Centro Asturiano, trabajó también con Pichito en el Oviedo. «Era un trabajador infatigable. Se marchaba del club el viernes y no llegaba hasta el lunes, porque se pasaba todo el fin de semana viendo partidos y jugadores. Tenía muy buen ojo con los futbolistas». Coincide con Quique Marigil en que «siempre te decía las cosas a la cara, te gustase o no. Era una persona trabajadora, muy seria y responsable, que nunca te engañaba».

Pichito deja mujer, Josefina, y cinco hijos, Venancio, José Antonio, Azucena, Rosana y Cristina. El funeral por su eterno descanso se celebrará hoy, a partir de las 18 horas, en la iglesia parroquial de Santa María de Noreña. A los actos del sepelio acudirá una representación del Oviedo.