Gijón, Á. CABRANES

El Gijón Industrial se juega el domingo, a las 17 horas, la primera de las dos oportunidades que posee para asegurar el ascenso a Tercera División. Los fabriles ocupan una posición privilegiada en la tabla, al ser segundos, aventajando en cuatro puntos al Covadonga, primer equipo que marcha en posición fuera de ascenso, a falta de seis puntos por disputar. Será la primera oportunidad para asegurar tan ansiado objetivo, después de perder la categoría la pasada campaña en una temporada donde nada salió bien.

Víctor Molina, presidente del Gijón Industrial, se muestra esperanzado y cree que el domingo se puede hacer algo importante: «Esperamos lograr la victoria y no seguir sufriendo como lo hemos hecho durante toda la temporada», comenta. Los fabriles han tenido una campaña aciaga en cuanto a lesiones, donde cuatro miembros de la plantilla continúan recuperándose de sus dolencias: «Pablo, Hugo Fuentes, Jorge y Edu han sufrido rotura de ligamentos. Esto, unido a la sustitución del entrenador, nos llevó a tener un inicio dubitativo. Aun así, siempre creímos que este equipo estaría en los puestos altos», relata. Nené Vallina tomó las riendas del equipo en enero, y, con él, el conjunto gijonés ha sido el que más puntos ha logrado en la segunda vuelta, siendo uno de los revulsivos de la entidad gijonesa. «Acepté el reto cuando únicamente restaba un partido para la conclusión de la primera vuelta y ahora hemos sido el equipo que más puntos logró en la segunda mitad de la competición», destaca el técnico. Vallina cuenta con una amplia experiencia en Tercera y confía en los suyos para el domingo. «Espero ver al Indus el año que viene en Tercera», concluye.