Oviedo

El Oviedo Rugby Club resolvió con brillantez el compromiso que significaba el partido de vuelta de la promoción por la permanencia en División de Honor B.

El equipo asturiano ganó por un contundente 37-0 en su campo del Naranco a un Hospitalet desbordado por la calidad y el empuje del equipo que entrena Xavi Guerediaga.

A pesar de haber ganado ya en la ida por 15-17, el equipo ovetense afrontó el partido de ayer sin ningún exceso de confianza. Es más, hasta se podría decir que salió incluso más mentalizado que en el encuentro de ida, casi como si no tuviese ninguna renta a su favor, para tratar de limitar la euforia.

Y desde el primer momento empezó a marcar diferencias, que en el descanso llegaron a ser de 13 puntos con un Ignacio Álvarez estelar en el papel de lanzador. Y eso que el Hospitalet también dio muestras de algún peligro en el primer tiempo.

Pero en la segunda parte el conjunto local redobló sus esfuerzos y fue aumentando su diferencia hasta llegar a ese contundente 37-0 que no deja ninguna duda sobre la justicia de la eliminatoria.

Jugaron inicialmente por el Oviedo: Kike, Pintado, Pelayo, Tito, Goyo, Pintado II, Spataro, David, Lucas, Matías, José, Piero, Tom, Ignacio Álvarez y Xavi Guerediaga. Después también salieron Panchi, Miguel, Gelo, Salinas, Conde, Rey y Pato.

El Oviedo jugará de nuevo, pues, en la segunda máxima categoría del rugby nacional la próxima temporada, en la que estará también el Belenos avilesino. Al respecto del futuro de Guerediaga, que compagina la tarea de técnico con la de jugador, no quería manifestarse, pues de momento, como señalaba ayer a este periódico poco después del final del partido, «estamos de fiesta, estamos celebrándolo». Y es que el «tercer tiempo» ayer fue largo e intenso. Sin embargo, Guerediaga también dijo que «efectivamente hay que aclarar cosas con vistas al futuro, pero aún hay tiempo para ello».