Piedras Blancas, I. URÍA

Era un secreto a voces, pero ayer Leandro Fernández se decidió a revelarlo. El entrenador del Hispano abandonará el club al término de la presente temporada y renuncia al año de contrato que le resta con la entidad castrillonense. El técnico reconoció que las críticas de cierto sector de la directiva han pesado en su marcha, aunque aceptó su correspondiente parte de culpa en el descenso del equipo, que la próxima campaña jugará en Preferente. El entrenador aseguró que tiene varias ofertas sobre la mesa para dirigir otros conjuntos en Asturias. El Avilés, entre otros, según fuentes cercanas al castrillonense, se interesó por su situación para incorporarlo a su estructura, sin especificar qué banquillo ocuparía.

El presidente del Hispano, Elpidio Otero, aceleró ayer las negociaciones para encontrar el nuevo responsable deportivo del conjunto verdiblanco. José Manuel Muñiz, hombre de la casa, y Florentino Angulo, desligado del Candás, han sonado como posibles candidatos, aunque en la contratación de este último también parece haberse interesado el Avilés como pieza para su escuela de fútbol.

Leandro dirigirá al equipo por última vez, este domingo, a las 17.00 horas, ante el Sporting B, con el «orgullo de saber que los jugadores han dado la cara hasta el final, a pesar de las numerosas dificultades». El técnico no podía disimular su satisfacción por la victoria que sus pupilos cosecharon frente al Ribadesella el pasado domingo y señaló que «los futbolistas que están ahora son los que han estado ahí en todo momento». Fernández mostró su agradecimiento a Otero y subrayó que está convencido de que el club solucionará «en cuanto pueda» la deuda que mantiene con él, que asciende a cinco mensualidades.

Leandro expuso su malestar con un sector de la directiva «que no entendió que no se puede pedir que rinda al máximo a un equipo del que se marcharon por problemas de cobro muchos jugadores y que no contaba con un preparador físico». El castrillonense entonó el mea culpa y añadió que su inexperiencia en la categoría y los escollos para desarrollar su sistema de trabajo fueron otros factores a tener en cuenta. «Lo mejor del Hispano es la plantilla; es difícil encontrar personas así en el fútbol, y en todo momento me mostraron su apoyo», concluyó el entrenador.