Avilés, I. URÍA

«La próxima temporada nos volcaremos más con el primer equipo», aseguró ayer José María Tejero, máximo accionista del Avilés. El dirigente prefirió quitar hierro a la pésima clasificación del conjunto blanquiazul en Tercera, la peor de toda su historia, y apuntó que mientras no cambie de categoría, «es lo mismo estar en la 7.ª plaza o en la 11.ª de la tabla». El objetivo para el curso siguiente será de nuevo el ascenso, aunque esta vez el responsable de la entidad dejó entrever que se intentará confeccionar una plantilla con mayores garantías de luchar por uno de los puestos con premio.

Según Tejero, los cambios necesarios para lograr esa meta comenzaron días atrás, con el acuerdo que alcanzaron el club y el entrenador, Roberto Robles. El perfil del técnico, estricto y veterano, agrada al máximo accionista, que consideraba el relevo en el banquillo clave para el nuevo proyecto. «Lo primero que necesitábamos ya lo tenemos: un entrenador con más carácter, con una forma de pensar diferente. Lo siguiente será realizar una renovación de la plantilla de aproximadamente un 50 por ciento», explicó el dirigente.

El máximo responsable del Avilés reconoció que hará falta completar el equipo «con varios jugadores ofensivos» y subrayó que se trata de un proyecto nuevo al que prestará más atención. «Esta temporada los objetivos del club se han cumplido en parte. El conjunto juvenil de División de Honor recuperó la categoría, y el equipo de Primera Regional, aunque no consiguió el ascenso, hizo un buen papel. El resto de los equipos de la escuela han tenido resultados acordes con las expectativas, salvo el benjamín de Segunda».

El máximo accionista avilesino señaló que el conjunto de Tercera ha rendido por debajo de lo que se esperaba de él. «No ha dado toda la satisfacción que se suponía. El año que viene, habrá que pensar más en él». José María Tejero apuntó que la decepción de la afición tras la nefasta campaña de los blanquiazules es lógica. «Los socios siempre quieren lo máximo del equipo, pero la realidad es la que tenemos, mientras no cambiemos de categoría».