Gijón, Víctor RIVERA

«Estoy muy contento y el balance es muy positivo porque estamos arriba cuando quedan tres partidos y tenemos muchas opciones de ascender». Mate Bilic es uno de los mejores ejemplos en en Segunda División de lo que es un refuerzo de invierno. El delantero croata cumple una vuelta en el Sporting y, desde su llegada, ha jugado un papel determinante en la buena trayectoria de los rojiblancos. Bilic jugó su primer partido de esta segunda etapa el día de Reyes en el estadio Arcángel ante su ex equipo, el Córdoba. Aquel día no fue titular, pero con su arenga en el descanso ya demostró que iba a tener un peso específico importante dentro de la plantilla.

A base de goles y, sobre todo, de trabajo, Bilic se convirtió enseguida en un referente para la afición, para sus compañeros y para su entrenador. Hasta el punto que logró desplazar al banquillo a David Barral, quien era uno de los máximos goleadores de la categoría hasta la llegada del croata. En las 21 jornadas que se han disputado desde su llegada a Gijón, Bilic ha participado en diecinueve partidos (diecisiete de ellos como titular), en los que ha disputado 1.505 y ha marcado ocho goles que lo sitúan con el tercer mejor artillero de la plantilla. Tan sólo Kike Mateo (12) y Barral (11) superan al croata.

Bilic se muestra optimista ante el final de temporada de los rojiblancos: «Quedan tres finales, la primera es el partido ante el Córdoba y tenemos que salir a ganar». Bilic, que ha madurado enormemente desde su primera etapa en Gijón, se muestra feliz en su regreso, pero confiesa que «estaré más contento cuando ascendamos y ahora lo tenemos al alcance de la mano». El croata mejora en su segunda etapa los guarismos de la primera, pero reconoce que hay factores que le han ayudado, como que «ya conocía este equipo y esta ciudad y eso me hizo más fácil aportar mis goles y mi trabajo». Bilic huye del protagonismo, ya que considera que «somos un equipo y todo el mundo está aportando cosas». El croata explica que «siempre es más importante el equipo que el futbolista, porque un jugador sin equipo no puede hacer nada».

Bilic coincide con su entrenador en que el Sporting podría tener cierta ventaja en este sprint final por el ascenso. «Será muy complicado. Nosotros tenemos dos partidos en casa y quizá eso nos dé cierta ventaja», asegura. El croata ve motivos para el optimismo porque «físicamente y anímicamente estamos en las mejores condiciones y todo depende de nosotros, por lo que estoy convencido de que vamos a lograr nuestro sueño».

Bilic se enfrentará a uno de sus ex equipos en el que no dejó demasiado buen recuerdo. En su regreso al Arcángel fue pitado, pero el croata asegura que «jugaré sin rencor». Bilic cree que «el Córdoba es un equipo rocoso que va a venir a encerrarse atrás».