Avilés, Albina FERNÁNDEZ

Miramar vivirá el domingo un nuevo derbi entre el Marino y el Avilés, el primero en Tercera división desde hace diez años. El último choque en campo luanquín fue en Segunda B, en la temporada 2002-2003, un partido desquiciado en el que se impusieron los locales (2-1) después de que Alonso fallara un penalti para los avilesinos en el minuto 87, y en el que el colegiado, el vasco Sánchez Maroto, mostró 18 tarjetas, tres de ellas rojas. Los jugadores del Marino hicieron pasillo a los avilesinos por su victoria en la Copa Federación en medio de la ovación del público, pero fue el único momento amigable y sin tensión de todo el encuentro.

El marinista Jeffrey Hoogervorst es el único jugador superviviente de los 25 que intervinieron en aquel partido, aunque el capitán del Avilés, Gustavo Gutiérrez, es en la actualidad el delegado del Marino. El jugador holandés estaba cedido por el Sporting y marcó de cabeza el primer gol de su equipo en el minuto 46 para igualar el de Uriel a la media hora para el Avilés. Oscar Vallina sentenció en el 51 para los locales. «Recuerdo que había mucha gente y un gran ambiente en las gradas, mucho más que en los partidos que jugamos esta temporada contra ellos, tanto en la Copa Federación como en la liga», señaló Jeffrey, que podrá vivir un nuevo derbi el domingo (17:00 horas) de no mediar un contratiempo de última hora. «Para mi es un partido más. El derbi es más importante para el club y para la afición que para los jugadores, y nuestra intención es darles a todos una satisfacción con la victoria. Además, siempre es bonito ganar al equipo del pueblo vecino», explicó.

La historia, sin embargo, dice que el Avilés es favorito. Los blanquiazules ganaron tres de los cinco encuentros disputados (dos de ellos en Tercera) y perdieron dos (uno en cada categoría); marcaron once goles y sólo encajaron cinco. La mayor goleada visitante en Tercera fue en la temporada 1986-87 con 1-5 y en Segunda B diez años más tarde, la 1996-97, con 1-4. El Marino ganó los dos últimos enfrentamientos. En Tercera, temporada 2000-2001, por 1-0, y el último el ya citado en segunda B, temporada 2002-2003, por 2-1.

Jeffrey está convencido de la victoria de los suyos. «Creo que somos más fuertes y estamos muy motivados porque si ganamos habremos dado un paso muy importante en nuestro objetivo de quedar campeones para jugar con más garantías por el ascenso, pero también somos conscientes de que tenemos que ir partido a partido», explicó.

El Marino es favorito. Líder incontestable, tiene una de las mejores plantillas de la categoría y tras el ascenso del Oviedo se convirtió en el enemigo a batir. Sólo perdió ante el Universidad en liga y frente al Barakaldo en la Copa Federación, y aventaja en 18 puntos a un Avilés que está octavo en la tabla y que intentará sumar la tercera victoria consecutiva para mantener la ilusión de luchar por los puestos de privilegio.