Madrid, Agencias

El entrenador del Madrid, Manuel Pellegrini, aseguró ayer que para su equipo y para el Barcelona, los dos conjuntos que luchan por el título de Liga, acabar «un año sin conseguir nada será un castigo duro».

Se acerca el final de la Liga y se comienza a ver la posibilidad de que uno de los grandes del fútbol español acabe la temporada en blanco, sin conseguir Liga, Liga de Campeones o Copa. Pellegrini reflexionó sobre ello en la previa de un encuentro decisivo del Madrid en Mallorca, esta noche.

«Tanto para el Barcelona como para el Madrid pasar un año sin conseguir nada es un castigo duro. Para nosotros más duro todavía, porque en los otros dos campeonatos quedamos eliminados al principio, en la Copa, y en octavos de la Liga de Campeones», manifestó.

«Por eso tenemos mucha esperanza en conseguir una Liga que signifique un título. De no ser así será muy duro. El Barcelona tuvo ilusión en otros campeonatos y si se queda sin nada será un año complicado. Al final sólo gana uno, pero creo que el proyecto institucional de los clubes seguirá sin que pase nada», opinó.

Coincidió Pellegrini con el técnico del Barcelona, Pep Guardiola, en que los dos equipos merecen esta temporada el título de Liga. «Es algo utópico porque las cosas no se pueden compartir, pero los dos equipos han hecho una campaña extraordinaria en Liga», afirmó.

Evitó la polémica, como es habitual en Pellegrini, cuando fue preguntado por las críticas al equipo de Cristiano Ronaldo tras el milagroso triunfo en el último minuto del pasado domingo en el estadio Santiago Bernabeu ante Osasuna.

«Cada vez que habla un jugador del Madrid se interpreta de distinta forma. Internamente el plantel sabe la manera que tenemos de pensar cada uno. No hay ningún problema interno por ninguna declaración de un jugador», afirmó.

«Son declaraciones después de terminar un partido que tienen cosas positivas y también errores. Cada uno le da la interpretación que quiere», agregó sin querer opinar.

Por último, Pellegrini consideró clave la mentalidad de «salir a ganar desde el primer minuto» en la difícil visita de hoy a Mallorca, sin valorar que la presión ha aumentado para sus jugadores. Según el chileno, están acostumbrados a convivir con ella.

«La presión es la misma para Madrid y Barcelona, que están acostumbrados a ella. No les puede afectar. Por historia están obligados a entrar a ganar todas las semanas, todos los partidos. Jugadores, cuerpo técnico e hinchada están acostumbrados. Al final el que se equivoque menos se va a quedar con el título», dijo.