Gijón, J. E. C.

Alfredo García Amado, gerente del Sporting, tuvo que regresar urgentemente ayer por la tarde de Madrid al conocer el fallecimiento de su suegro, Francisco, Quico, Arquer, que tenía 72 años. El consejo del Sporting, que preside Manuel Vega-Arango, pasó al final del día por el tanatorio de Cabueñes a dar el pésame a Cristina -esposa de Alfredo García-Amado- y a su familia por tan dolorosa pérdida. Arquer tenía tres hijas y estaba casado con María Elena de Santiago. La capilla ardiente de Francisco Arquer Prendes-Pando está instalada en la sala 7 del tanatorio gijonés de Cabueñes. El funeral de cuerpo presente tendrá lugar estar tarde, a partir de las 18 horas, en la iglesia parroquial de San Lorenzo.