Avilés, Albina FERNÁNDEZ

La negociación entre el Ayuntamiento y el Real Avilés por la deuda y el embargo de las cuotas de la escuela de fútbol está estancada. El Ayuntamiento ya depuró la cantidad que reclama el club y los 206.426,73 euros iniciales quedaron en 107.000, una cifra con la que difiere el club, que baraja una cantidad inferior a los 50.000 euros. «El Avilés puede reclamar si no está de acuerdo, pero es lo que hay que pagar», comentó ayer el concejal de Deportes, Román Álvarez.

La deuda se acumula desde hace diez años, y en septiembre de 2009 los padres de los niños de la escuela recibieron una notificación de los servicios tributarios del Principado advirtiendo de que no pagaran nada al Avilés. El club protestó y pidió que se levantara el embargo hasta saber la cantidad exacta, pero el proceso siguió adelante.

En el último año ambas partes se reunieron en busca de una solución, pero las posturas están lejanas. «Las cosas siguen igual. El club no recibirá ayudas del Ayuntamiento ni del Principado mientras tenga deudas porque sería ilegal. Cuando fueron campeones de la Copa Federación no cobraron el premio por este motivo y ellos sabrán como solucionar el problema porque ni el Ayuntamiento ni el Principado van a saltarse la ley», señaló el Concejal. Y es que el Avilés también debe a la Seguridad Social y Hacienda un millón de euros aproximadamente, aunque el club asegura que estas son deudas generalizadas del fútbol y que el problema es el Ayuntamiento. «Sabían que reclamaban cosas absurdas pero no nos escucharon porque mientras tanto nos extorsionan, y tampoco interesa en el PSOE que el club tenga derechos sobre el Suárez Puerta y La Toba», defendió Ulpiano Cervero.

Las conversaciones podrían continuar el próximo lunes, aunque el acuerdo parece lejano. «Será más de lo mismo porque todo pasa por que paguen», insistió el edil.

La plantilla siguió ayer con los entrenamientos cara al partido de Copa Federación contra el Langreo del domingo (19:00 horas en el Muro de Zaro). Muñiz podrá contar con Rúa, Zeus y Hugo Reguero.