Gijón, Rubén DÍAZ

Ayoze García Pérez (Puerto de la Cruz, Tenerife, 22-11-85) irradiaba ayer por la mañana satisfacción después de finalizar sin incidencia alguna el primer entrenamiento de la jornada.

No era una sesión cualquiera para el interior canario, después de las molestias de psoas que arrastraba desde la salida a Pajares. «Hoy -por ayer- he realizado el primer entrenamiento completo con el resto de compañeros de la plantilla y las sensaciones que he tenido son bastante buenas. Ahora lo que me toca es tratar de ponerme al nivel físico de ellos lo antes posible».

Ayoze reconoce que la lesión le obligará a esforzarse aún más para alcanzar su mejor estado de forma: «Al empezar la pretemporada son días de mucha carga de trabajo físico para poner las piernas a punto. Así, que si te lesionas, como ha sido mi caso, es cierto que se pierde bastante tiempo en comparación con el resto de la plantilla. Lo importante es que todavía cuento con bastantes días por delante para ponerme bien. Así que trabajaré el doble que mis compañeros para igualarles en rodaje».

Su gran ilusión es debutar esta tarde con el Sporting en Ponferrada: «Puede ser que tenga minutos sin continúo encontrándome bien. Lo que el entrenador crea conveniente. Lo que está claro es que quiero empezar a jugar porque donde se coge el ritmo de competición es dispuntado partidos. Tengo muchas ganas de poder jugar. Quiero estar con el equipo para ir acumulando minutos e ir ganando ritmo de competición».

Las molestias en el psoas no cree que le vayan a restar competitividad en su pulso con Diego Castro para hacerse con la plaza de interior zurdo durante la Liga. «Es una lesión que no me ha impedido seguir entrenando aunque no lo haya podido hacer con el resto de mis compañeros hasta ahora mismo. Es cierto que estoy a un nivel físico inferior a él. Por eso lo importante es que pueda empezar a jugar y que así el entrenador tenga la oportunidad de poder elegir».

Ayoze es de los futbolistas que rehuyen sacar conclusiones de los partidos de pretemporada. Sin embargo, atisba que la plantilla rojiblanca apunta buenas maneras:«El equipo llega bastante cansado a los partidos porque la carga de trabajo es muy alta. La clave en esta etapa es acumular minutos de juego. Pero se ve que el grupo está muy compenetrado y que dispone de muchas alternativas».