Mieres del Camino,

H. NÚÑEZ

Un gol de Cascón en el segundo minuto del tiempo añadido dejó al Caudal con la miel en los labios. El equipo mierense había aguantado casi todo el encuentro al poderoso Eibar, pero una jugada de estrategia los privó de sumar un punto en Ipurua. La expedición blanquinegra se quedó con cara de todos y regresó a Mieres cariacontecida. El meta caudalista Sergio Segura reconoce que «fue una pena, pero ahora tenemos que seguir trabajando y olvidarnos de este resultado y pensar ya en Osasuna B».

Los mierenses realizaron un gran encuentro en uno de los campos más complicados de la categoría y ante uno de los grandes candidatos al ascenso como es el cuadro que entrena Manix Mandiola. Segura reconoce que «jugamos muy bien, les plantamos cara hasta el punto de que creo que pudimos ganar. Es cierto que no hubo muchas ocasiones de gol para ambos, pero nosotros tuvimos dos en las que pudimos llevarnos el encuentro».

El tanto del conjunto armero llegó en una jugada a balón parado propiciada por una «falta dudosilla» como recuerda Segura; pero la acción del tanto eibarrés «era evitable» como reconoció el entrenador caudalista, Paco Fernández. En este sentido, el meta confiesa: «Podíamos haber aplicado una táctica que habíamos entrenado, pero no lo hicimos y así, para mala fortuna, nos marcaron el gol». El madrileño recalca: «Ahora ya no sirve de nada lamentarse, tenemos que pensar en el próximo encuentro y olvidarnos de éste».

La derrota escuece entre los caudalistas, pero Segura saca conclusiones «positivas porque dimos la cara ante un buen rival y volvimos a demostrar que el equipo compite cada semana y ante cualquier contrario». Esta línea es para el meta «la que tenemos que seguir pues si continuamos de este modo, estaremos luchando hasta el final de la Liga».

El encuentro de la próxima jornada ante el Osasuna B se ha adelantado al sábado. El partido contra el filial «rojillo» está previsto para las seis de la tarde en las instalaciones de Tajonar.