Oviedo, M. D. B.

El montañismo asturiano logró en las últimas horas un peculiar doblete en el Himalaya. Jorge Egocheaga, en compañía del zamorano Martín Ramos, hizo cumbre ayer en el Makalu (8.463 metros), el decimosegundo «ochomil» del ovetense. Un día antes, a mediodía del viernes, coronaba su quinto «grande» Rosa Fernández, el Kangchenjunga (8.586). El gijonés Nacho Orviz, que participa en la expedición de la vitoriana Edurne Pasabán al Everest sin oxígeno, tuvo que abortar ayer el ataque a la cumbre más alta del planeta (8.848) debido al mal tiempo.

La página web de Martín Ramos, compañero habitual de Jorge Egocheaga en las últimas expediciones, informaba de la cumbre en el Makalu mediante un enlace con el blog del alpinista rumano Horia Kolibasanu. Los dos montañeros españoles coronaron el Makalu junto a Kolibasanu y Peter Hamor hacia las 14.00 horas en Nepal, diez de la mañana en España, aprovechando una ventana de buen tiempo.

Tras cumplir su objetivo en el Makalu, a Jorge Egocheaga sólo le quedan dos cumbres para completar las catorce montañas que superan los ocho mil metros: el Lhotse (8.300 metros) y el Kangchenjunga, precisamente coronada ayer por Rosa Fernández.

Aunque la montañera asturiana hizo cumbre a mediodía del viernes, hasta ayer no pudo contactar con su marido, Javier Morán, tras regresar al campo base. Según Morán, Rosa Fernández inició el ataque en la noche del jueves desde el campo 4 (7.700 metros) junto al catalán Óscar Cadiach y el sherpa Dawa. Afectado por el frío, Cadiach retornó al campo 4, por lo que Rosa y Dawa llegaron en solitario. Tras un largo y dificultoso descenso, Fernández, Cadiach y Dawa llegaron al campo base (5.500 metros) a primera hora de la tarde de ayer.

El Kangchenjunga es el primer «ochomil» de Rosa Fernández tras superar un cáncer. Antes había subido al Gasherbrum II (8.035) en 1997, al Makalu en 2004, al Everest en 2005 y al Lhotse en 2008.