Me siento como ese dentista de cada diez que no recomienda los chicles sin azúcar o como ese lector de cada diez que reconoce que compra la revista «Interviú» no por los artículos, sino para ver fotos de chicas desnudas. Seré raro, pero creo que el Barça puede ganar esta Liga. Las cuentas me salen. Cuando Los Otros pierdan un partido, hasta el Atlético de Madrid se dará cuenta de que el equipo de Mourinho está desnudo, que Ronaldo es poco más que un velocista poco elegante, que Özil no es Dios, que Benzema es buen delantero para Osasuna, que Xabi no es Xavi y que Kaká, sencillamente, no existe. Me puedo equivocar, por supuesto. Puede que Kaká sí exista, pero está escondido.

Por desgracia, parece que la mayoría de los culés da la Liga por perdida. La afición del Barça siempre ha estado de lado de los dentistas que recomiendan los chicles sin azúcar y de los que dicen que compran «Interviú» por los artículos y reportajes. La historia nos ha hecho así. Pero es que el Barça de Guardiola no tiene nada que ver con la historia del Barça. El escritor francés Gustave Flaubert, que decía que era fatalista como un turco, creía que todo lo que podemos hacer por el progreso de la humanidad y nada es exactamente lo mismo. Flaubert, que vivió y murió en el siglo XIX, estaba seguro de que vería el regreso de los místicos, que siempre vuelven en las épocas oscuras, y de las languideces universales, las creencias en el fin del mundo y la esperanza de un Mesías. ¿Los culés no hemos aprendido nada tras estos años de triunfos? ¿Seguimos siendo tan fatalistas como un turco o como Flaubert? ¿Dejaremos de animar a nuestro equipo porque creemos que todo lo que podemos hacer para que el Barça meta el miedo en el cuerpo a Los Otros y nada es exactamente lo mismo? ¿Volverán los místicos azulgranas? ¿Volveremos a ver al enjuto Joan Gaspart de pie, solo, con las manos en los bolsillos, serio como un agricultor en plena sequía, aguantando los abucheos del Camp Nou? ¿Ha vuelto el culé lánguido y de frágil memoria? ¿Ya vislumbramos el fin del mundo creado por Guardiola y los chicos de La Masía? ¿Volveremos a fichar en verano todo lo que se mueva, Neymar incluido, con la esperanza de encontrar un Mesías que ya no puede ser Cruyff?

Nueve de cada diez dentistas pueden equivocarse, nueve de cada diez compradores de «Interviú» tienen ojos para algo más que para los reportajes, nueve de cada diez culés han leído demasiado a Flaubert. Podemos ganar la Liga. Y no olvidemos que esta temporada ya hemos ganado tres títulos y aspiramos a otros tres. No está mal, para vivir en una época oscura.