«El equipo tiene que estar formado por once tigres sobre el campo que se dejen la piel. Es lo mínimo que deben hacer los futbolistas. Nosotros, los técnicos, tenemos que lograr que lo hagan porque se lo deben a este gran club y a la gran afición que les apoya». Es lo que piensa Abelardo Fernández (Gijón, 1970), que fue central del Sporting durante 212 partidos, luego del Barcelona, también internacional absoluto 54 veces y que ahora es segundo entrenador rojiblanco y mano derecha del nuevo técnico, Javier Clemente.
Precisamente Clemente le dirigió durante cuatro años en la selección española; el vasco se apoya ahora en el gijonés porque sabe de su capacidad dentro de los vestuarios. Abelardo, tras estos dos primeros días con el nuevo entrenador, que les dio charlas a los futbolistas y al cuerpo técnico, piensa que «no cambió nada de cuando me tenía de jugador a ahora. Tiene las ideas de fútbol muy claras, habla directo para bien o para mal al futbolista y sabe motivar. Y el futbolista está contento con él por esa forma de actuar. Es muy trabajador, repite mucho cómo quiere que juegue el futbolista y por eso estas primeras conversaciones fueron largas, para transmitirles sus conceptos».
El entrenador gijonés dice de Clemente que es «un monstruo como persona, un diez. Es cercano y quiere también que todo el cuerpo técnico, donde estamos Tejada, Isidro, el preparador Gerardo Ruiz y yo, estemos implicados para que el equipo empiece a ganar partidos. El jugador acabará encantado con Javi porque tiene las ideas muy claras y sabe lo que le pide».
Ahora el Sporting está a seis puntos de los puestos de la permanencia a falta de dieciséis partidos, que es un reto complicado con este calendario inicial de Atlético de Madrid, Racing, Barça y Sevilla. El ex central matiza que «sabemos los puntos que tenemos y que nos faltan 23 o 24 para salvarnos. Pero ahora no debemos pensar dónde estamos porque irían mal las cosas. El futbolista se podría bloquear. Lo ideal es pensar en salir a ganar sólo el domingo siguiente».
Precisamente el rival es un Atlético de Madrid que con Simeone ha cambiado y está en racha. «Sólo el Madrid y Barça están por encima de los demás, en el resto hay bastante igualdad aunque uno puede estar el décimo o nosotros el decimonoveno, pero no debemos de tener miedo a ningún equipo, aunque ellos llegan bien. Hay que tomarlo como una final y luego quedarán otras. Estamos capacitados para ganar», comenta.
Abelardo tiene claro que la misión inmediata de Clemente es «mejorar en todo y, sobre todo, recuperar a los jugadores anímicamente y darles confianza para que salgan de abajo y se salve el equipo. Por eso se trajo al número uno y nosotros estamos para acatar sus órdenes y ayudarle. Ahora se hizo un ejercicio de finalización y Clemente nos indicó lo que tenemos que hacer. También nos preguntó por las características de algunos futbolistas y el funcionamiento del grupo. Todos debemos estar unidos para que el club siga en Primera».
Se considera que para recuperar la confianza es que cada jugador sepa bien su labor. Abelardo pone ejemplos como que «un defensa no debe regatear, ni un interior tiene como prioridad ir de cabeza, pero todos deben trabajar en defensa y en ataque. Cada uno debe realizar bien su trabajo para mejorar el grupo. Cuando estás bien clasificado, aunque entrenes mal e igual pierdes un partido, no pasa nada, pero en nuestra posición hay que entrenar mejor».
Lo que tienen claro todos, jugadores y cuerpo técnico, tras las reuniones con Clemente es lo que éste les demanda. «Intentar dar el máximo rendimiento y que la gente se deje la piel en el campo en los partidos haciendo las cosas que pidió desde el principio. Le dejará contento se pierda o se gane. No queda otra que trabajar mucho para mejorar y también nos va a exprimir mucho a los que estamos a su alrededor», señala el gijonés.
Finalmente en cuanto a la afición rojiblanca, Abelardo dice que «no se le puede pedir más. Solamente que siga apoyando al equipo».
