Avilés, Albina FERNÁNDEZ

El técnico del Avilés, Ricardo Bango, pide a los suyos en el clásico ante el Langreo de mañana en el Suárez Puerta (18:00 horas) un partido «serio, sobrio y con determinación, como se hizo ante el Covadonga», y a ser posible lograr un buen resultado «para ver si podemos tener un poco de tranquilidad para seguir evolucionando».

Y es que Bango insiste en que el ambiente que rodea a los blanquiazules no es propicio. «El equipo necesita recobrar la confianza, la estabilidad y la tranquilidad, pero en el ambiente en el que estamos es muy difícil. A día de hoy tendríamos que ganar 5-0 al Langreo para que se reconociese lo que hace el equipo. Pero son épocas. Lo que me preocupa es que el equipo tenga buen funcionamiento y que el jugador se de cuenta de que lo hace bien».

El técnico aseguró que el clásico ante el Langreo no es fiable para calibrar el juego del Avilés cara a la liguilla. «Sería lo lógico pero ahora no nos vale porque, insisto, el equipo necesita recuperar la autoestima. Sirvió el partido con el Caudal porque había reconocimiento en todas partes de que el equipo evolucionaba bien, ahora no».

Bango adelantó que el Avilés jugará con futbolistas rápidos en banda y con Naya en punta. «Hay dos o tres variantes que barajamos y nos inclinaremos por la que nos permita variar la forma de jugar sin hacer cambios. Lo seguro es que la profundidad, la velocidad, la posibilidad de contraataque y de juego combinativo no va a variar al margen de quien juegue», concluyó.

Avilés, A. FERNÁNDEZ

El clásico de mañana en el Suárez Puerta reúne todos los requisitos para ser un gran partido de fútbol. El Avilés y el Langreo tienen dos de las mejores plantillas de la categoría, llevan casi toda la temporada metidos en puestos de liguilla y afrontan el choque en un buen momento.

El único pero son las amenazas que los ultras se han intercambiado por internet después de los incidentes ocurridos en la ida en Ganzábal, pero la Policía garantiza la seguridad y ninguno de los dos equipos quiere follón. Tanto los capitanes como las directivas piden calma a los suyos.

El capitán blanquiazul, Sietes, tiene claro lo que espera de los suyos. «Pido deportividad, olvidarse del pasado y que nuestra gente nos haga llegar su calor, que esté con nosotros, no contra el rival», comentó para añadir: «Es una fiesta del fútbol y hay que dejarse de otras cosas. Que la gente del Avilés demuestre que es una afición ejemplar». Sietes reconoció que es «un partido importante», pero recordó que solo son tres puntos más lo que está en juego.

El capitán azulgrana, Asenjo, se pronunció en términos similares. «No tiene por qué haber incidentes. La gente tiene que ir a ver un partido que es atractivo porque somos dos equipos en una dinámica buena, pero que no es más importante que el resto porque solo son tres puntos más».

El presidente del Langreo, Senén Riera, pidió también deportividad. «No creo que haya problemas, al menos eso me dijeron los míos y los creo porque es gente civilizada. En todo caso, son cuatro, el resto van a animar al equipo porque la imagen del Langreo está por encima de todo».

José Luis Rodríguez piensa que no habrá problemas. «La seguridad está garantizada y no creo que nadie venga aquí a la guerra. Al menos eso espero», comentó.