Gijón, Á. CABRANES

El Sporting y Preciado van camino de los tribunales. Tras el fracaso de la negociación directa de los gestores del club con Fermín Gutiérrez, representante del ex entrenador rojiblanco, el acto de conciliación celebrado ayer en la UMAC (Unidad de Mediación Arbitraje y Conciliación) por los abogados de ambas partes tampoco cerró el acuerdo. Ni Manuel Preciado ni los directivos rojiblancos comparecieron para verse las caras. La principal discrepancia reside en la forma de pago de los 1,2 millones de euros que le corresponden al técnico que ya incluyen la parte proporcional de la prima por la permanencia. El Sporting ha propuesto un pago aplazado en 15 entregas que ha sido rechazado de plano por el técnico.

La Liga de Fútbol Profesional obliga al Sporting a liquidar la deuda con el técnico a 30 de junio, a menos que las partes alcancen un acuerdo para aplazar el pago o liquidar la deuda en otros términos. El objetivo principal del Sporting es el de evitar el juicio. Tanto es así que incluso contemplan hacer el pago único del contrato del cántabro. El Sporting está en tiempo y forma para hacerlo hasta el próximo 30 de junio.

El abogado del Sporting, Ramón de Santiago, intentó acercar posturas con el abogado de Preciado, Javier Ferrero, pero su reunión en la UMAC terminó sin acuerdo. La mediación es un espacio habitual para resolver este tipo de litigios y evitar llegar a los juzgados. Un camino que, desde el club rojiblanco, aseguran no estar dispuestos a forzar. Si las diferencias continúan abiertas, el Sporting afrontará la totalidad de la ficha de Manuel Preciado a final de temporada, tal y como estipula la LFP.

La relación entre las partes se ha deteriorado casi con la misma velocidad con la que se produjo la conexión. Un mes después de la destitución del técnico, este acto de conciliación no ha cerrado el acuerdo. El Sporting asume el pago a Preciado de la cantidad que le corresponde, pero busca flexibilidad en el pago que el técnico no les ha concedido.