Los primeros síntomas indican que Javier Clemente planea repetir el equipo que ganó al Sevilla en Granada pasado mañana, sábado. De las Cuevas sigue siendo baja por lesión y la pierna larga de Gálvez vendrá bien para el encuentro del Nuevo Los Cármenes, donde saben de la importancia del duelo y de que el nuevo Sporting busca desquiciar a los rivales. El Granada de Abel Resino lleva una racha de tres derrotas seguidas, por lo que no quiere volver a tropezar. Y menos, en su campo. Y menos, ante un rival considerado directo. Los síntomas que ha mostrado Clemente en sus primeros planes son consecuentes con su fórmula de trabajo, que pasa por sorprender a la hora de formar los equipos. En Gijón ha sorprendido desde el primer día, con resultados, hasta ahora, satisfactorios. La cuestión reside en que los más finos analistas del lugar vayan cogiendo el truco de por dónde van a ir los tiros del fin de semana. Por lo demás, quedamos a la espera de que alguien nos saque de dudas y nos ilumine sobre las relaciones entre el entrenador rojiblanco y el del Granada, Abel Resino, portero que fue del Atlético de Madrid. A saber si coincidieron en el club madrileño, si se miraron mal en una estación de ferrocarriles o si riñeron en un coloquio televisivo. Las procelosas aguas del fútbol español es lo que tienen, que hay que llevar sherpas que guíen los pasos de los simples testigos. El desencuentro con Míchel ha abierto muchos ojos.

Pero resulta que hace pública el Gobierno la deuda total del fútbol español con Hacienda y los dirigentes del Bayern Múnich, quizá crecidos por la goleada al Basilea, apelan al dinero que llega a España desde Alemania para escandalizarse por los impagos. Con el debido respeto, tienen bastante razón porque se supone que los clubes alemanes cumplen con sus obligaciones tributarias. Las fórmulas de control anunciadas por la UEFA se ve que o no se aplican o se aplican con criterios federativos españoles, criterios del vale todo. Los tiempos exigen, más que nunca, seriedad.

Por cierto, damas y caballeros, si pregunto, ¿molesto?: ¿si Mareo no se puede comparar con Lezama, de quién es responsabilidad? Porque alguien tendría que responder cada año del trabajo en la Escuela de Fútbol. Ya puestos a preguntar: ¿Mendy es canterano del Sporting? Y si no lo es, ¿qué es? ¿Muniain es canterano del Athletic Bilbao? ¿Y Javi Martínez? ¿Churruca fue canterano del Sporting? ¿Y Quini? Preguntas que quedan en el aire para el sano debate futbolístico.

El mundo, por lo demás, se ha paralizado a la espera de la sublime decisión de Pep Chanel Guardiola, cuya continuidad en el banquillo del Barcelona parece que se anunciará en breve. La historia de cada año va a llegar a su final feliz porque el entrenador sabe que no va a encontrar mejor equipo que el que tiene ni entorno más favorable para desarrollar su trabajo. Habrá negociado bajo cuerda y habrá logrado gran parte de las peticiones realizadas. La fotografía con Sandrusco está al caer y se hará antes de los grandes duelos que se avecinan para la primavera. Las dudas quedarán resueltas.