Navia, Fran CASTRO

Tras la derrota de ayer, el Langreo suma tres jornadas sin ganar y ve cómo se aleja el segundo puesto del Avilés, mientras que el Tuilla, cuarto, está a tres puntos (con un partido menos) y el quinto, el Condal, a tan sólo cuatro. Por su parte, los tres puntos son de oro para el Navia, ya que lo alejan de los puestos de peligro. El partido se les puso muy mal a los locales nada más empezar, ya que el Langreo salió más metido y a los dos minutos se puso por delante con una gran acción individual de Matías, que finalizó con un gran disparo que entró por la escuadra derecha de Kevin.

Tras el gol siguió el claro dominio visitante y Villa, en el minuto 10, tuvo una buena opción en un remate flojo que detuvo bien Kevin. Éstos fueron los mejores minutos de los langreanos, que parecía que no notaban en exceso las importantes bajas con las que se presentaron, sobre todo en la línea defensiva. A los 20 minutos el partido se detuvo al caer una fuerte granizada sobre El Pardo. Los jugadores tuvieron que salir del campo durante cinco minutos y, al reanudarse, se vio claramente que el parón benefició al Navia, que pasó de ser dominado a, poco a poco, ir metiéndose en el encuentro.

Poco antes de llegar al final de la primera parte el Navia consiguió el empate con una acción de falta directa ejecutada por Dioni: se estrelló en la barrera, pero el rechace le cayó en una buena posición a Checho, que, de fuerte disparo, puso el empate.

La segunda parte fue muy igualada, sin dominador claro, y con la gente más pendiente de lo que sucedía en la grada -en la que hubo algún roce entre aficionados naviegos y langreanos- que en lo que ocurría sobre el césped, donde escaseaban las ocasiones para uno y otro conjuntos. En el minuto 75 la tuvo el Langreo muy clara, con una gran acción individual de Diego Arias, que, tras marcharse de dos jugadores locales, se plantó solo ante Kevin; su remate, no obstante, se marchó fuera por muy poco.

Poco después fue el Navia el que consiguió el tanto de la victoria en una jugada en la que se produjeron desajustes en la línea defensiva visitante, muy mermada en el partido, lo que permitió a Roberto plantarse solo ante Calleja y fusilarlo a placer. De ahí al final, el Langreo trató de conseguir el gol del empate, sobre todo con balones largos, pero el Navia apenas pasó apuros y se llevó tres importantísimos puntos.